La figura radical y furiosamente inococlasta de Stella Díaz Varín, la poeta que marcó época en la escena literaria local de los años 50 por su actitud punk, sigue cautivando.

Porque el reciente premio que obtuvo el documental La Colorina, de Fernando Guzzoni y Werner Giessen en el Festival de Trieste (mejor Película en la sección Contemporánea del certamen), se suma al galardón a la mejor dirección en el pasado Sanfic y a las buenas críticas cosechadas en los festivales de Montreal y México.

"El premio es importante en la medida que representa el primer reconocimiento internacional para la película y valida la historia en términos de que es capaz de sensibilizar e interpretar anhelos mas transversales y no sólo de relevancia local. Además, es un buen paso para (asistir) a festivales como el de Torino, el que va a hacer curatorias a Trieste", explica desde Italia su director Fernando Guzzoni.
 
La Colorina se estrena en salas locales el próximo 13 de noviembre y según su director el filme ha sido pedido por certamenes como el Bafici (Buenos Aires) y Toulouse. "Mes a mes es enviada a numerosos festivales en el mundo, por lo que estamos a la espera de nuevos avisos de selecciones para que la película siga haciendo su recorrido", explica Guzzoni.
 
El director cree que la poderosa imagen de Stella Díaz como una artista radical y a contrapelo de las oficialidades de turno, cautiva por su carácter trangresor, que le ha permitido darse a entender en Europa. "En Chile sin duda genera empatía la historia ya que desentraña un personaje del under pero con una honestidad y desenfado que va a incomodar y que provoca admiración. La identificacion y buena acogida que tuvo en Italia, Montreal o Mexico se debe a que todos nos identificamos con personajes como Stella que poseen una transgresion y radicalidad, una vehemencia y desenfado que hacen admirarla independiente del lugar o contexto del cual provenga", cuenta.