La Policía cerró hoy dos autopistas en Los Angeles después de recibir una llamada anónima que alertaba de un paquete sospechoso en los alrededores, informó la edición electrónica del diario Los Angeles Times.

Los agentes pusieron en marcha el dispositivo ante la posible amenazas de bomba, aunque tras dos horas de búsqueda infructuosa se optó por reabrir las vías de comunicación.

"Parece que el equipo de desactivación de explosivos está satisfecho con el rastreo, y no hay ningún objeto sospechoso en el área", afirmó el policía de tráfico Heather Hoglund.

El nudo de comunicaciones entre la autopista 605 y la 5 se encuentra en el área de Santa Fe Springs, al sur del núcleo de Los Angeles. Los servicios de seguridad de esta ciudad californiana reciben alrededor de 15 llamadas diarias que denuncian paquetes sospechosos.

En octubre de 2005 varios carriles de la autopista 605 fueron cerrados en la misma zona después de que otra llamada alertara a la Policía sobre una mochila abandonada en las proximidades, que finalmente estaba vacía.