El mundo del espectáculo vive la muerte de otro gran artista. Tras las partidas de emblemáticos músicos como el ídolo del rock Lemmy Kilmister y el rupturista David Bowie, se suma la partida del actor británico Alan Rickman, estrella que destacó por su nutrida y elogiada carrera en teatro, televisión y cine.

Uno de los personajes que masificó su talento fue el del profesor Severus Snape, uno de los más queridos de la millonaria saga de Harry Potter.

Tras la confirmación de su muerte a los 69 años producto de un cáncer, una de las primeras en difundir un mensaje de condolencias fue J.K. Rowling, la creadora de la saga y quien trabajó de cerca con el actor.

"No hay palabras para expresar cómo me ha conmocionado y devastado escuchar de la muerte de Alan Rickman. Él era un magnífico actor y un hombre maravilloso", escribió la escritora a través de Twitter. "Mis pensamientos están con Rima y el resto de la familia de Alan. Hemos perdido un gran talento. Ellos han perdido parte de sus corazones", agregó refiriéndose a sus cercanos y a Rima Horton, con quien el artista convivió por 50 años, contrayendo matrimonio recién el año pasado.

En 2011, Rickman escribió una afectuosa carta para Rowling, luego de su última interpretación como el profesor Snape. "Tres niños se han convertido en adultos desde que recibí una llamada de Jo Rowling, que contenía una muy pequeña clave, y que me persuadió de que había más en Snape que un repetitivo vestuario, y que aunque sólo habían sido publicados 3 libros para ese entonces, ella dejaba su inmensa y dedicada narrativa en las mejores manos. Es una necesidad muy antigua escuchar historias. Pero una historia necesita de un buen narrador. Gracias por todo Jo", escribió entonces.

El actor murió solo meses después del estreno de la cinta Eye in the Sky (2015) y a poco del lanzamiento de Alicia a través del espejo (2016), donde nuevamente puso su voz para el personaje de la oruga azul,  Absolem.