Señor director:

Podría comenzar esta carta señalando todo lo perjudicial que será la llegada de Jorge Segovia y la partida de Harold Mayne-Nicholls, tanto para el fútbol chileno como para la sociedad toda; sin embargo, ya habrá ocasión para hablar sobre eso.

Lo que quiero ahora, antes que todo, es agradecer a este grupo de luchadores por hacer todo lo que hicieron, agradecer por mejorar considerablemente el nivel del fútbol chileno, desde las divisiones inferiores, la competencia interna, pasando por la infraestructura deportiva, posicionando a nuestra selección en el primer nivel mundial, pero por sobre todo, gracias por cambiar la mentalidad no sólo del futbolista chileno, sino que del chileno común y corriente, gracias por demostrarle a la gente que cuando se trabaja duro se pueden conseguir logros, que cuando se quiere se puede.

Gracias a Marcelo Bielsa, Luis Bonini, Eduardo Berizzo, Daniel Morón y a todo el cuerpo técnico que está o que en algún momento estuvo.

Pero, por sobre todo, gracias a Harold Mayne-Nicholls por la labor realizada, por ser un dirigente decente y no un empresario sediento de dinero.

Camilo Martínez Sepúlveda
Centro Deportivo de Estudiantes de Derecho
U. de Chile