Como se esperaba la lluvia fue protagonista en el Gran Premio de Bélgica, y eso unido a una excelente largada le dieron la victoria a Lewis Hamilton, quien además pasó a comandar el campeonato mundial de pilotos.

El británico aprovechó una buena salida para tomar la delantera, así como el error de Webber en la partida, donde sus ruedas patinaron, lo que lo dejó en el sexto puesto.

Tras dominar desde el vamos, Hamilton no tuvo problemas para mantener la vanguardia, y su equipo tomó buenas decisiones en el desarrollo, las que lo mantuvieron al frente aún sin tener el mejor auto.

La carrera se corrió por momentos con lluvia intensa, hubo accidentes y el auto de seguridad apareció en varias ocasiones.

El español Fernando Alonso sufrió primero con un choque por detrás que le dio Rubens Barrichello (que no logró terminar su carrera 300 en la F1) y tuvo que detenerse, pero cuando había retomado posiciones perdió el control del monoplaza en la curva de Les Combes, golpeó contra las protecciones y tuvo que abandonar.

Otro que perdió chances fue Button, que cuando iba segundo fue embestido por Vettel, lo que le costó su salida de la carrera. Finalmente, cuando quedaban 10 vueltas, Kubika se pasó de frenada en el pit lane y le cedió el segundo puesto a Webber.

Con la victoria, Hamilton tomó el liderato del campeonato con 182 puntos, seguido de Webber con 179 y tercero quedó Vettel con 151.