Doce capítulos, más de 300 horas de filmación, siete meses de trabajo, 10 millones de espectadores, una pareja y cinco hijos. Con esos números, la serie documental An american family se convirtió en la pionera del género de telerrealidad y entró a la historia televisiva como el primer reality.

El programa -que fue emitido en 1973 por la cadena PBS- buscaba retratar a la familia estadounidense de esa época y para eso siguió las interacciones de los Loud durante siete meses, incluyendo la grabación del quiebre del matrimonio protagónico (Pat Loud le pidió en cámara a su marido que se fuera de la casa) y la revelación de que uno de los hijos era homosexual. Ahora, la historia de la realización y sus consecuencias reviven en el telefilme Cinema verite, que HBO (señal 34 de VTR y 630 de Movistar) estrenará el próximo domingo 19, a las 18.15 horas.

El elenco está encabezado por Diane Lane, Tim Robbins y el ex Soprano James Gadolfini, en su primera incursión televisiva desde el final de la serie. Ellos son, respectivamente, la pareja principal y el productor que orquestó el show. Lane contó que para prepararse para el rol estudió de la serie y el material que no fue emitido, además de las memorias que Pat Loud publicó un año después del programa. "Espero que los Loud se sientan un poco reivindicados con la película. Comparados con hoy en día, ellos realmente eran muy ingenuos y refrescantemente honestos. Tomaron una proporción mítica para nosotros, porque representamos su experiencia, pero, al mismo tiempo, conocerlos fue muy gratificante", dijo la actriz sobre la experiencia.

El telefilme, dirigido por Shari Springer Berman y Robert Pulcini (Esplendor americano), mezcla recreaciones de escenas que se vieron en la producción original, material ficticio sobre lo que pasó fuera de cámaras y extractos verdaderos del reality, para contar las experiencias de la familia y cómo enfrentaron la reacción pública al programa, que mayoritariamente fue negativa. Cinema verite tampoco estuvo exenta de controversia. Craig Gilbert, productor de An american family, denunció el filme como "falaz". Y los mismos Loud tampoco estuvieron contentos con el guión, pero según informó el New York Times, aceptaron una compensación económica para no hacerlo público.