En cinco años, el número de futuros periodistas bajó en 60% y el de ingenieros forestales en 47%, según datos del Ministerio de Educación. Los estudiantes, al parecer, están analizando el mercado laboral antes de escoger carrera, fenómeno que también se ha extendido a Pedagogía Básica y Trabajo Social.

En lo que parece ser un ajuste natural del sistema universitario, algunas carreras han bajado su tasa de matriculados nuevos en el período 2007 y 2008, según cifras recientemente publicadas por la División de Educación Superior del Ministerio de Educación. Las estadísticas indican que las más afectadas son Ingeniería Forestal y Periodismo. La primera registró una baja de 22% en los matriculados de primer año en 2008 en relación al año anterior, mientras que desde el 2003 a la fecha ha bajado su matrícula de primer año en un 47%.

La segunda es la carrera que posiblemente está entre las de peor fama en el sistema. Se trata de Periodismo. Poco más de 1.300 alumnos se matricularon en ella en 2008, esto es un 18% menos que el año anterior y un 60% menos que cinco años atrás. En resumen, se trata de carreras cada vez menos atractivas para los jóvenes. Especialmente por los bajos sueldos y las bajas probabilidades de encontrar empleo que ofrecen.

Por ejemplo, los titulados entre 2005 y 2006 de Ingeniería Forestal ganan un 11% menos que los egresados entre los años 2000 y 2001, según datos de Futuro Laboral.

El bajo interés ha llegado a tal punto que, según señalan en el Colegio de Ingenieros Forestales, se han cerrado cinco programas: el de la Universidad de La Frontera -que creó una carrera más amplia, Ingeniería en Recursos Naturales-, de la Universidad Santo Tomás, U. Mayor, U. Iberoamericana y U. Católica de Temuco. Hoy sólo cinco planteles ofrecen Ingeniería Forestal. Un fenómeno que parece responder al ajuste natural del mercado.

Hace apenas 12 años, se pensaba que la carrera de Ingeniería Forestal tendría un campo laboral amplio a la sombra del desarrollo de esta industria en el país. Hasta finales de 1999, la carrera registraba más de tres mil alumnos en todo el país y la matrícula crecía en torno a tasas del 10% a 17% anual.

Sin embargo, a partir del año 2000 comenzó el declive. Entre 2004 y 2005 se desplomó en un 65% y en 2008 lo hizo en 22%: ese año, los estudiantes en todo el país eran poco más de 1.500. Según señala Andrés Bernasconi, académico de la Universidad Andrés Bello, lo que sucedió es que los planteles y los alumnos se dieron cuenta de que la industria forestal no creó los puestos que se esperaban. "Las empresas no necesitaban a varios ingenieros forestales, con uno les alcanzaba para cubrir diferentes campos", explica.

En el caso de Periodismo, a los ya conocidos bajos sueldos -que en promedio no superan los $ 600 mil pesos y más de la mitad no llega a los $ 300 mil-, se suma la poca estabilidad laboral: están entre los profesionales que más se cambian de trabajo, cuatro veces en cinco años. El Colegio de Periodistas ha contribuido con esta percepción de carrera copada desde hace ya un par de años, haciendo llamados a los estudiantes a informarse bien antes de matricularse. En 2007 se titularon casi 1.300 periodistas, con una curva de constante ascenso, por lo menos, hasta esa fecha.

En este caso, la caída también viene precedida de un alza importante. Entre 2000 y 2004, la carrera experimentó un alza creciente, de un 70% en el número de matrículas, y llegó a tener hasta más de 10 mil estudiantes. La caída comenzó el 2005 con un desplome que se fue agudizando con el tiempo: poco más de siete mil universitarios la cursaban en 2008 y 1.300 la escogieron como carrera ese año.