Luego que los diputados DC Gabriel Ascencio y Gabriel Silber, pidieron al ministro del Interior, Rodrigo Hinzpeter, revisar las designaciones de cinco gobernadores que -a su juicio- "no cumplen con los requisitos de excelencia que se ha impuesto el gobierno", el subsecretario de esa cartera, Rodrigo Ubilla, dijo que la petición constituye "una 'caza de brujas' que pretende desprestigiar al gobierno".

Los parlamentarios sostienen que los gobernadores de Los Andes, Angelo Barbieri; Chiloé, César Zambrano; Punta Arenas, Gloria Vilicic; Tierra del Fuego, Catalina Besnier; y Cautín, Miguel Mellado, están cuestionados por diversos motivos que incluyen "reproches comerciales, no pago de deudas previsionales a sus trabajadores, juicios pendientes contra el Estado y  acusaciones de fraude o estafa".

Ante esa acusación, Ubilla dijo que "el gobierno, al momento de seleccionar a sus autoridades, ha siempre buscado (...) la excelencia; personas para cumplir en cada provincia del país su labor de servicio público cercano a la gente", y "gente que con su honra pueda servir de buena forma". En este sentido, aseguró, "las acusaciones livianas y frías apuntan a dañar" la honra de esas personas, dijo.

Sin embargo, Ubilla expresó que los gobernadores que se comprometieron a arreglar su situación "tendrán que cumplir".

Ascencio había acusado una "falta de prolijidad en los nombramientos, que se concretaron a través de un acuerdo político entre la UDI y RN, saltándose los filtros que ellos mismos se han autoimpuesto", tras ironizar con la frase de campaña del Presidente Sebastián Piñera: ¿Esta es la nueva forma de gobernar que nos prometieron", se preguntó el diputado. 

El viernes pasado el gobierno debió dejar sin efecto la nominación del gobernador del Biobío, José Miguel Stegmeier, luego que se hicieran públicos sus vínculos con Colonia Dignidad.