Señor director:

En relación con la reciente declaración gubernamental de las nuevas áreas protegidas de la isla Salas y Gómez, un territorio del cual queda mucho por conocer, considero recomendable que junto con ello se implementen líneas específicas de fomento a la investigación. En particular, desde la perspectiva del patrimonio turístico, es fundamental comprender las implicancias que tendrá esta área de resguardo y su ecosistema con la vecina Rapa Nui -ancestralmente ligadas-, así como las oportunidades de desarrollo e innovación que podrían abrirse para la práctica del turismo responsable en estas islas.

Esta visión de conservación, desarrollo e innovación se incrementa en la opción de ampliar la superficie de protección hasta las 200 millas, vinculándola de esta forma con Rapa Nui en su límite oeste, permitiendo a esta isla beneficiarse del reservorio biológico cautelado por el área marina protegida. Ello también favorece la biodiversidad y genera una mejor oferta para el desarrollo de actividades como el buceo y la observación de fauna marina, además de aportar a la sustentabilidad y autonomía de la isla.

Finalmente, es necesario considerar que medidas como éstas deben ser consultadas con el pueblo Rapa Nui, pues su vinculación con Salas y Gómez es parte de sus relatos ancestrales, que sindican a los remotos roqueríos como puntos de abastecimiento y parte de su área de influencia económica, ecológica y cultural.

Miguel García
Coord. Instituto del Patrimonio Turístico
U. Central de Chile