El dramaturgo Juan Radrigán, una de las voces más influyentes y radicales del teatro chileno de las últimas décadas, ganó hoy el Premio Nacional de Artes de la Representación 2011.

El autor de Hechos consumados y Las Brutas, fue elegido en una ceremonia realizada en el Ministerio de Educación, por un jurado compuesto por el escenógrafo Ramón López, el anterior Premio Nacional de las Artes de la Representación, Ramón Núñez, el rector de la U. de Chile, Víctor Pérez, el rector de la Universidad de Talca, Alvaro Rojas, y el Ministro de Educación, Felipe Bulnes.

Radrigán ha explorado diversos géneros literarios como narrativa, poesía y ensayo. Con el estreno de su primera obra teatral, Testimonios de las muertes de Sabina, inició en 1979 una nueva veta en su producción literaria, en la que destaca hasta nuestros días: la dramaturgia. Entre sus obras más relevantes se cuentan Hechos consumados (1981), El toro por las astas (1982), El pueblo de mal amor (1986), La contienda humana (1988) y El encuentramiento (1996).

En julio estrenó en el Festival De Teatro de Miami su más reciente trabajo: Amores de cantina, la que será estrenada el 16 de septiembre en el GAM. Además, su obra Las Brutas acaba de ser adaptada en Londres la semana pasada, bajo la dirección de Catherine Boyle y Sue Dunderdale. Justamente Boyle dijo a La Tercera sobre el autor que “me parece un dramaturgo de alcance internacional. Trabajar el texto (en traducción) de Las brutas con la directora Sue Dunderdale y con actores de muy alto nivel, me ha convencido de que es una obra maestra”, dijo.

La entrega del premio debía realizarse el pasado viernes, pero la decisión fue pospuesta para hoy lunes. Entre los candidatos para adjudicarse el galardón estaban, aparte de Radrigán, el diseñador Sergio Zapata y la actriz Delfina Guzmán.

El Ministro de Educación, Felipe Bulnes, dijo sobre la elección que “fue una decisión unánime y fue elegido por su larga trayectoria como dramaturgo, por su contenido poético y su capacidad para hablar de Chile desde el teatro”.

Al dar a conocer el premio, Radrigán fue llamado por teléfono y llegó raudamente al ministerio desde un ensayo que estaba realizando con actores jóvenes. Al anunciarse el galardón, dijo que “estoy feliz porque creía que me lo deberían dar aunque no creía que me lo darían. Lo importante es que (el premio) me permitirá dejar de hacer tantas clases (hago en cinco lugares) para dedicarme a escribir. Cuando me avisaron, lo primero que pensé fue en mis personajes de Hechos Consumados, los que siendo mis personajes más pobres, han sido adaptados en Europa. Y hasta donde he llegado yo también”, contó.

Para uno de los jurados, Ramón Núñez, “no costó para nada decidir. Yo he dirigido algunas obras suyas y siempre supe que le darían el Premio Nacional. Tenía que llegar a sus manos”, dijo.

Radrigán recibirá un premio de $16.000.000 y una pensión vitalicia de 20 UTM (cerca de $770.000).