Señor director:

La economista de Libertad y desarrollo, Cecilia Cifuentes, ataca la ley Dicom afirmando que las instituciones  de crédito no tienen cómo discriminar entre sus clientes.

Me parece que Cifuentes está equivocada. Las instituciones de crédito, especialmente del retail, dieron créditos indiscriminadamente a muchos chilenos que no podían pagar los altos intereses que les cobraron. El caso más emblemático es el de La Polar. Ahora bien, dichas empresas del retail -que ahora también son empresas financieras- se dieron cuenta de que no podían seguir con esa irresponsable conducta. El mismo diario La Tercera nos informaba hace unos días que las tarjetas de crédito de estas instituciones habían disminuido de nueve a unos cuatro millones y medio.  Esto demuestra que las instituciones de crédito tienen como discriminar y han optado por discriminar nada menos que a cuatro y medio millones de clientes.

Sergio Donoso