El delantero Robinho afirmó hoy que la disciplina implantada por Dunga en la selección ha enderezado en Sudáfrica el rumbo equivocado que tomó la preparación del equipo en el Mundial de Alemania, disputado hace cuatro años.

"Respeto la opinión de nuestro comandante. Quien manda es Dunga", manifestó el punta del Manchester City, que juega como cedido en el Santos brasileño.

Robinho no parece incómodo con el régimen disciplinario del actual entrenador, que prohíbe entrevistas exclusivas y prolongadas salidas de la concentración, además de establecer mayor número de entrenamientos a puerta cerrada.

"En el Mundial pasado, lamentablemente nos preparamos de una forma que afectó el resultado. Fue una época de mucha fiesta. Después del Mundial de Sudáfrica habrá tiempo para salir a tomar un café", dijo el jugador sobre el ahora distante trato con la prensa.

"Estamos con la postura que Dunga", dedicó tras una sonora carcajada a un reportero que insistió en preguntarle si no le molestaban las regla del entrenador.