A oscuras recibió al plantel de Deportes Concepción el terreno de los Campos Deportivos en Nonguén, su lugar de entrenamiento, al momento de su arribo para retirar sus pertenencias.

Como si fuera una paradoja, la falta de iluminación del lugar ocultó en un principio la desazón y preocupación de los jugadores morados.

Sin embargo, al momento de expresar su tristeza, lo hicieron con dureza sobre una decisión por la que se sienten perjudicados.

“No entiendo lo que está pasando. Los únicos perjudicados aquí son gente inocente. Creo que vuelve a ganar la mafia, porque todos sabemos quienes son los responsables de esto y veo que no les están haciendo nada”, expresó con firmeza el volante Juan Leiva, uno formado en la cantera morada por lo que es de los que más siente la desafiliación de los penquistas.

"Nosotros hicimos nuestro trabajo en cancha y por la irresponsabilidad de ladrones quedamos fuera. En especial me da pena por la gente, porque me siento identificado con el club y siento mucha tristeza por él”, agregó el mediocampista.

Leiva también indicó que, a la hora de tomar las decisiones, nadie se preocupó por las otras repercusiones de estas. “La mayor pena de nosotros es por la gente, por todos los niños que van al estadio y a las escuelas de fútbol. Uno como jugador tendrá que buscar otros horizontes, pero qué pasa con esa hinchada, qué pasa con la gente que le ha dedicado años a este club. Es una tristeza que cuesta expresar”, señaló.