El costo de la democracia



SEÑOR DIRECTOR:

Frases como “cuatro años perdidos”, “¿cuántos hospitales se habrían podido construir?”, “estas discusiones no les importan a los chilenos” inundan los espacios de opinión. Discrepo. Estos cuatro años han demostrado que Chile goza de una democracia robusta, donde la ciudadanía es consultada sobre temas relevantes y su decisión es respetada. Prefiero vivir en un país con muchas elecciones transparentes que estar a merced de dirigentes que se adjudiquen “la voz del pueblo”. Y si eso cuesta caro, es un precio que estoy dispuesto a pagar.

Juan Pablo Escudero T.

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.