La complejidad de la delincuencia



SEÑOR DIRECTOR:

A propósito de la columna publicada por la académica Lucía Dammert, resulta necesario ahondar en el vínculo entre criminalidad y negacionismo.

Aunque es correcto hablar de una nueva criminalidad organizada, estructuras delictivas complejas, que derivan en empresas con el fin de obtener ganancias ilícitas, han existido siempre. La nueva criminalidad es transnacional, se concentra en ciudades puerto y ocupa países como tránsito de mercaderías.

Este nuevo escenario exigió avances en técnicas investigativas, fortalecer la incautación de bienes y enajenación temprana, desestabilizando económicamente a las redes criminales. Tal como indica la ley N° 21.575, existe una modificación de diversos cuerpos legales con el objeto de mejorar la persecución del narcotráfico y crimen organizado.

Pero esta nueva criminalidad no acaba con una mejora en la persecución penal ¿Qué estamos haciendo en la región para evitar su proliferación? Aquí, la conducta negacionista por parte del canciller venezolano es clave y grave. Una nueva criminalidad transnacional exige cooperación internacional, no solo traspaso de información policial sino intercambio de estrategias de persecución, diálogo fluido en materia de migración, importación de tecnologías y nuevas competencias.

Un gobierno negacionista, facilita la impunidad, no solo no tiene memoria, sino que se niega la verdad y justicia.

María Javiera Olguín Ríos

Abogada penalista

Comenta

Los comentarios en esta sección son exclusivos para suscriptores. Suscríbete aquí.