Opinión

Michelle Bachelet a la ONU: una respuesta novedosa e inteligente a los desafíos globales

Michelle Bachelet a la ONU: una respuesta novedosa e inteligente a los desafíos globales

En julio de 2025, más de treinta excancilleres de América Latina y el Caribe emitimos una declaración pidiendo que, por primera vez en la historia, una mujer de la región sea elegida Secretaria General de la ONU. Expresamos que “es hora de que una mujer lidere las Naciones Unidas” y señalamos una “clara brecha en la representación global” pues, en ocho décadas, América Latina y el Caribe han tenido solo un Secretario General y nunca una mujer ha ocupado el cargo. Esta ausencia femenina y marginalización de una región con más de 655 millones de habitantes refleja inequidades que aún permean las estructuras de poder global.

La evidencia es clara: solo el 26,9% de los escaños parlamentarios y el 21% de los cargos ministeriales están ocupados por mujeres a nivel mundial. Apenas 29 países tienen jefas de Estado o de Gobierno, lo que significa que al ritmo actual, la paridad tomará 130 años. En organismos internacionales, la situación es igualmente crítica.

El 2014 Margot Wallström, exministra de Relaciones Exteriores de Suecia, asombró y hasta provocó risas con su entonces novedosa idea de una “política exterior feminista”. Afirmó que “la política exterior feminista es una política inteligente, no es sólo lo correcto”. Su afirmación no fue puro voluntarismo: baste el ejemplo de que los acuerdos de paz en los que participan mujeres tienen un 35% más de probabilidades de sostenibilidad. La evidencia refuerza lo que intuitivamente sabemos: las mujeres aportan perspectivas, experiencias y metodologías diferentes para abordar los conflictos. En un mundo donde las soluciones tradicionales han mostrado sus límites, necesitamos esa diferencia.

La candidatura de Michelle Bachelet a la Secretaría General de Naciones Unidas representa precisamente una respuesta a las exclusiones históricas que han marcado la gobernanza mundial. Pero no solo se trata de corregir exclusiones: su candidatura, además de ser la de una mujer latinoamericana, es la de una persona que por su propia historia de vida y su experiencia profesional y política, comprende profundamente y desde diversas perspectivas el poder global y las dinámicas de exclusión. En palabras de Wallström, no solo se trata de una candidatura correcta, sino que además inteligente.

Ninguno de los desafíos de mayor eficiencia e incidencia de las Naciones Unidas, de las amenazas al muiltilateralismo y al orden internacional basado en reglas y principios, las cuestiones de la democracia y los derechos humanos, la emergencia climática y el futuro del planeta, la promoción y protección de la paz, son ajenos a su experiencia y público compromiso.

Por eso es que, como reconoce el presidente del Senado, Manuel José Ossandón, una candidatura como la de Michelle Bachelet debiera contar con el respaldo transversal de todos los sectores pues, además de representar a nivel global a nuestro país y a nuestra región, articula y encarna una respuesta inteligente, novedosa y estratégica a los desafíos del siglo XXI.

Por Antonia Urrejola, ex ministra de Relaciones Exteriores

Más sobre:Secretaria General de la ONUMichelle Bachelet

⚡¡Extendimos el Cyber LT! Participa por un viaje a Buenos Aires ✈️ y disfruta tu plan a precio especial por 4 meses

Plan digital +LT Beneficios$1.200/mes SUSCRÍBETE