SEÑOR DIRECTOR:

Últimamente se ha hablado y escrito mucho acerca de la crisis de seguridad, pero priman las quejas por sobre las soluciones.

Si queremos tener más seguridad en el largo plazo, una acción fundamental es reinsertar fuera del delito a los miles de hombres y mujeres encarcelados que en algún momento futuro estarán en libertad.

Nuestra experiencia de quince años es que para lograr que un exconvicto abandone el delito una vez en libertad se necesita pasar por dos fases. La primera es que tenga un proceso psicosocial de cambio que lo motive, desde el fondo de su ser, a abandonar el delito. La segunda es acompañarlo en sus primeros pasos una vez en libertad. Las experiencias internacionales exitosas avalan estas recomendaciones.

Si no queremos la reincidencia en el delito, para garantizar la futura seguridad es preciso que tanto Gendarmería como las instituciones de la sociedad civil que trabajan por la reinserción sigan estas recomendaciones. La simple ejecución de talleres laborales en las cárceles, si bien ayuda, no resuelve el problema de fondo.

María de los Ángeles Herrera

Directora Ejecutiva

Fundación Mujer Levántate