SEÑOR DIRECTOR:
Justificada preocupación ha provocado la denuncia a nivel de Naciones Unidas de que el Puerto de San Antonio es un lugar de paso habitual para el embarque de drogas con destino a los mercados mundiales, y que además en dicho puerto se encuentre sin operar el sistema de scanner que el Estado adquirió para ser utilizado por el Servicio de Aduanas para enfrentar las actividades del narcotráfico.
El Servicio Nacional de Aduanas ha sufrido serios cuestionamientos en los últimos años respecto de muchas materias de su responsabilidad, y es de conocimiento de sus autoridades que se encuentra sobrepasado por la realidad, pero también por la incerteza jurídica que provocan algunas unidades operativas en su quehacer como es el irrespeto al Acuerdo sobre el Valor en Aduana de la Organización Mundial de Comercio incorporado al artículo 69 de la Ordenanza de Aduanas por la Ley 20.780 del año 2014.
Los años de pandemia provocaron problemas importantes en su accionar, y un servicio de trabajo presencial fue reemplazado por un trabajo telemático cuyas consecuencias hoy se están conociendo, entre ellas una falta notoria en materia de capacitación del personal (los fiscalizadores actúan y deciden por criterio propio ante la ausencia de criterios institucionales).
El no estar en funcionamiento un scanner en el referido puerto por alguna poco justificable razón es de suma importancia para muchos, pero la realidad es que los problemas en Aduanas son de mayor profundidad y lo del scanner es un efecto de ello.
Patricio Guzmán B.
Administrador público y asesor en comercio exterior
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