¿Cómo cuidar el pelo seco? Mitos, consejos y precauciones

Ilustración: César Mejías

Algunas de las características del pelo seco es que se ve opaco y poco armónico, incluso aunque tenga volumen. Además, suele tener frizz, por lo que la apariencia deja mucho que desear. ¿Cómo reconocerlo y cómo tratarlo? En Práctico hablamos con especialistas para entender un poco más acerca del manejo de este tipo de cabello.




El pelo seco es el que necesita hidratación extra del acondicionador. Tiene una apariencia más bien áspera y es de textura frágil, con mayor tendencia a quebrarse, por eso es muy importante entender qué productos se deben utilizar para su cuidado. Existen champús especiales para pelo seco, los que contienen ingredientes que tienen como foco hidratar el tallo piloso; estos también se recomiendan a quienes se han hecho ajustes estéticos, como teñidos invasivos o decoloraciones, por lo que deben ser tanto hidratantes como nutritivos. Carola Andrews (@carolaandrewsm), peluquera socia de Milady Señorita, explica: “Los champús ideales para pelo seco son los hidratantes, ojalá que sean en conducto cremoso o nacarado. Yo los prefiero sin siliconas”.

Además del uso de los productos de limpieza adecuados, la dermatóloga de la Clínica Alemana, Dra. Francisca Daza (@franciscadazadermatologia) sugiere: “Los masajes y máscaras capilares, sobre todo las hidratantes, son buenísimas. También el uso de aceites como el de coco, de argán u otros aceites capilares, que son excelentes para hidratar, sobre todo las puntas o desde la mitad hacia abajo. El ideal es hacerlo después del lavado”. A ello se suma el beneficio de que pueden aportar brillo al pelo.

Otro elemento positivo, especialmente para el manejo del frizz, es el uso de fundas de almohada o turbantes de seda, ya que -como ese material tiene la característica de conservar la humedad a un nivel constante-, puede disminuir ese desagradable efecto normalmente relacionado con el cabello seco. Esto además tiene un buen efecto en el pelo crespo, ya que mantiene mejor la forma del rizo.

Y en cuanto a los mitos relacionados con el pelo seco, Carola Andrews aclara: “No es cierto que sea mejor no córtalo, ya que siempre es bueno ir ‘podando’ un poco. Tampoco es verdad que no haya nada que se pueda hacer para sacarlo de su estado, ya que hoy en el mercado existen muchas alternativas para mejorarlo, ya sean semipermanentes o tópicas”.

No cometas esos errores si tienes el pelo seco

La Dra. Francisca Daza señala algunos de los hábitos que hay que evitar cuando se tiene pelo seco:

- No hay que lavarlo tan seguido, ya que eso hace que se seque más.

- Lo peor para el pelo seco es teñírselo en tonos rubios o hacerse “luces”, porque eso implica decolorarlo, lo que reseca más aún.

- El uso del secador, la plancha y encrespadores también son hábitos dañinos para el pelo seco. Todo lo que sea calor directo daña las fibras capilares. En este tema, algo especialmente perjudicial pasar la plancha cuando el cabello está mojado.

Olive Fruit Oil Deeply Repairative, de Kiehl’s

Mascarilla para cabello seco o dañado que hidrata y fortalece las fibras del cabello, restaurando el brillo y la apariencia saludable.


Shampoo All Soft, de Redken

Shampoo suavizante con aceite de argán que limpia con delicadeza y suaviza el cabello seco y quebradizo, nutriéndolo y tratándolo desde el crecimiento hasta las puntas.


Aceite para tratamiento reparador, de Argania

Tratamiento reparador intensivo que nutre, hidrata y repara profundamente la fibra capilar especialmente en las zonas más castigadas


Spray desenredante cabello seco y dañado Monoi Karité de Lovea.

Ayuda a nutrir, suavizar y dar brillo al pelo, logrando una textura suave, ligera y luminosa.


Funda de almohada de seda de Lunna

Funda de almohada de seda mulberry- Tendrás varios beneficios para tu piel y pelo, sentirás los cambios en poco tiempo. La seda tiene buena absorción de la humedad y permeabilidad, teniendo proteínas naturales y aminoácidos, acelerando el metabolismo de las células de la piel, reducir la pigmentación facial y arrugas.

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