A pesar de la voluntad que ha mostrado el gobierno para concretar las reformas que faciliten el desarrollo de los proyectos eléctricos, y a que en el Congreso ha habido relativo éxito en la tramitación de estas reformas, en Colbún mantienen la idea de que no están dadas las condiciones para seguir avanzando en su proyecto Hidroaysén, que comparte con Endesa.

En el análisis razonado de la generadora se reiteran las quejas y se mantiene la recomendación hecha por el directorio de Colbún de paralizar este proyecto a menos que se vean  cambios reales.

“Colbún estima que no están dadas las condiciones para desarrollar proyectos energéticos de esta magnitud y complejidad”, señala el documento, que además explica en detalle la decisión de la eléctrica.

“A pesar que el proyecto Hidroaysén recibió la aprobación ambiental para construir cinco centrales hidroeléctricas en mayo de 2011, y que fue confirmada tanto por la Corte de Apelaciones de Puerto Montt como por la Corte Suprema, ésta aún no se encuentra a firme por existir reclamaciones pendientes desde hace 18 meses ante el Consejo de Ministros tanto del titular del proyecto como de opositores a él”, señala la empresa, la que agrega que con fecha 30 de mayo de 2012 “el directorio de Colbún decidió recomendar en las instancias correspondientes de Hidroaysén S.A. la suspensión indefinida del ingreso del estudio de impacto ambiental del proyecto de transmisión, en vista a que mientras no exista una política nacional que cuente con amplio consenso y otorgue los lineamientos de la matriz energética que el país requiere”.

En conjunto con Endesa Chile, la segunda generadora del SIC participa en el desarrollo de los proyectos hidroeléctricos en los ríos Baker y Pascua de la Región de Aysén, a través de un complejo que contará con una capacidad instalada de aproximadamente 2.750 MW cuya energía, una vez en operación, será comercializada de manera independiente por ambas compañías.