El desembarco de Slim en Europa ya quedó atrás. El magnate mexicano estaría  hoy comenzando una etapa de expansión en el viejo contiene tras evaluar su participación en la Oferta Pública de Acciones (OPA) de Realia, la inmobiliaria española.

La firma anunció en diciembre la venta de acciones, transacción que  debe ser autorizada por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CMNV) para llevarse a cabo. La oferta de 0,49 euros por cada acción de Realia abrió el apetito de Slim, quien analiza quedarse con el 100% de la propiedad de la inmobiliaria.

El camino para que Slim adquiera Realia comenzó a pavimentarse con el ingreso del magnate al mercado europeo en el sector inmobiliario. Hace poco menos de un mes, el empresario consiguió un sillón en el consejo de la firma española FCC, con sede en Barcelona. Slim se convirtió en el primer accionista de la compañía con el 25,63% del capital, posición que le permitió designar a otros tres consejeros.

FCC y Bankia son los actuales propietarios de la constructora española Realia. Ayer, tras conocerse el interés de Slim por la firma, los títulos de Realia se dispararon en la Bolsa Española (IBEX) más de un 10%.

Interés por Europa

Slim ha mostrado un particular interés por ingresar al mercado europeo.

Hace dos años el empresario mexicano puso sus ojos en la expansión de su imperio en el área de las telecomunicaciones. Austria fue el país escogido para el ingreso de América Móvil invirtiendo en Telekom Austria.

En paralelo a su desembarco en Europa, Slim está apostando por el mercado de los medios de comunicación en Estados Unidos, tras convertirse en el principal accionista del diario estadounidense The New York Times.

Carlos Slim es el segundo hombre más rico del mundo, luego del estadounidense Bill Gates, con un patrimonio de US$72,4 mil millones, según el índice de multimillonarios de Bloomberg.