El 98% de los postulantes para ser asesor previsional no pasó la prueba

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Por lo general, la desaprobación alcanza un 70%, pero esta vez superó el 95% ante mayor exigencia, por lo que los reguladores repetirán la prueba este año.


Sólo un 2,4% de las personas que hicieron la prueba para ser asesores previsionales aprobó el test que realizó la Superintendencia de Pensiones y la Comisión para el Mercado Financiero (CMF) en octubre del año pasado.

Este es el nivel más bajo en los 10 años que han pasado desde el establecimiento del sistema de acreditación de conocimientos para asesores previsionales, ya que la tasa de desaprobación de esta prueba suele ser cercana al 70%.

En total fueron 339 las personas que buscaban acreditar conocimientos para convertirse en asesores previsionales, de los cuales 277 eran nuevos postulantes, y 62 eran asesores que buscaban su continuidad. Cada cinco años tienen que rendir la prueba para revalidar sus conocimientos y así ser reinscritos en el registro.

Así, sólo aprobaron 8 personas, es decir, cuatro nuevos postulantes y cuatro asesores previsionales que estaban renovando su inscripción, por lo que 58 asesores que ejercían hasta el 31 de diciembre dejaron de hacerlo a partir de este año.

Desde la Asociación Gremial de Asesores Previsionales (AGAP) comentan que este nivel histórico de desaprobación se produjo porque hubo un cambio de metodología en la prueba de octubre de 2018 que no fue comunicado adecuadamente a los postulantes. En ese sentido, detallan que se eliminaron los verdaderos y falsos y aumentaron la escala para aprobar el test, por lo que si antes necesitaban 50% de aprobación, ahora subió al 57%.

Desde el gremio dicen que "no hay problema con que suban los requerimientos, pero la inquietud es que no se informó de manera adecuada el cambio de metodología y exigencia, ya que supimos que en algunas capacitaciones les dijeron que tenían que contestar la prueba completa y que no se iban a descontar las respuestas malas, sin embargo, eso no ocurrió porque la información no era real", explica Ann Katharine Clark, ex presidenta y actual tesorera de la AGAP.

Con este telón de fondo, el gremio se reunió con ambos reguladores para mostrar su inquietud, a raíz de lo cual la CMF y la Superintendencia de Pensiones decidieron que se realizará una nueva prueba de acreditación el 22 de marzo de 2019.

Tras consultar a ambos reguladores, aclararon que "la prueba para acreditar conocimientos se realiza al menos dos veces al año, pero en 2019 se realizarán tres (no es la primera vez que sucede): en marzo, mayo y octubre".

El cambio de metodología y exigencia ocurre luego de que en agosto del año pasado los reguladores detectaron casos de adulteraciones por parte de agentes de ventas y asesores previsionales, en el denominado Sistema de Consultas de Ofertas y Montos de Pensión (SCOMP), que tramita las ofertas de pensión para los futuros jubilados

La figura del asesor previsional y el requisito de acreditación de conocimientos nació como parte de la Reforma Previsional de 2008, para referirse a las personas jurídicas o naturales que asesoran en materias previsionales a los afiliados del sistema de pensiones, ya sea durante el período de acumulación de sus fondos previsionales o al pensionarse.

Su importancia radica en que la mayoría de ellos son contratados por afiliados cercanos a la jubilación para recibir orientación sobre la mejor modalidad de pensión a elegir (renta vitalicia o retiro programado) y en qué institución, sea AFP o compañía de seguros de vida.

La creación de la figura obligó a quienes ejercían esta labor -entonces la mayoría bajo la figura de corredores de seguros- a someterse a una prueba que demostrara su conocimiento previsional ante la Superintendencia de Pensiones. Si aprueban, pueden ejercer como asesores por cinco años y luego renovar la acreditación con un nuevo examen. Si no, no pueden ejercer hasta aprobar el siguiente examen.

En los primeros cuatro años desde la reforma, el promedio de aprobación fue de 29%. El año que había registrado la cifra de aprobación más baja fue en 2010, cuando sólo el 17% de los aspirantes al nuevo rango de asesor previsional logró pasar el test.

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