Ari Aster: "Yo no haría una película de Marvel, quiero hacer lo mío"

Aster
Los actores Jack Reynor y Florence Pugh interpretan a la pareja que llega a Suecia a las festividades de un culto pagano. Foto: BF DISTRIBUTION

Luego de ganar aplausos y el favor de Scorsese con Hereditary, el cineasta se consolidó como una de las mayores figuras tras el cine de terror. Aquí habla con Culto de su nueva cinta, Midsommar.


Precisión y hondura parecen marcar la ecuación que define al director Ari Aster. Su cine está colmado de imágenes con ambición de pasar a la posteridad, una dirección de actores extremadamente rigurosa y una mirada en que pueden convivir el terror más humano con un fino humor negro. Brilló en 2018 con Hereditary (traducida como El legado del diablo), su devastador acercamiento a una madre y una familia que desciende a los infiernos, por el que ganó aclamación de la crítica y del mismo Martin Scorsese, quien en reiteradas ocasiones lo ha elogiado.

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Aún masticando ese suceso, y situado junto a Robert Eggers (La bruja) como dos de los nombres más prometedores del cine independiente de terror, este año Aster volvió con su segundo largometraje, Midsommar (desde este jueves en Chile), con el que juega en otro terreno, pero en el que exhibe la misma determinación para avivar las peores pesadillas. Esta vez es mediante la historia de Dani (Florence Pugh), una chica que viaja a Suecia junto a su novio (Jack Reynor) y los amigos de este para pasar unos días en una comunidad que no tarda en revelarse como un culto pagano. Como en su anterior filme, encabezado por Toni Collette, parte fundamental del peso dramático descansa en Pugh. "Hay muy poco de ella en el personaje de Dani, pero no puedo imaginarme a nadie más interpretando ese papel", señala Aster sobre la actriz de 23 años que estará en Mujercitas y Black Widow.

Escogiendo por momentos sus palabras con el mismo cuidado que compone sus historias, el director comenta a Culto el origen de su cinta: "Venía de un quiebre amoroso, entonces quería superar eso a través de una película sobre una ruptura. Pero se me acercó una compañía sueca que quería que hiciera una película de terror folk en Suecia. Entonces encontré la manera de combinar el filme que quería escribir con un trasfondo de película de terror folk. Eso terminó convirtiéndose en esta especie de cuento macabro".

-Ha mencionado que hacer estas dos cintas ha sido terapéutico. ¿De qué manera se relaciona Midsommar con sus experiencias?

-No puedo ser tan específico, pero puse mucho de mí mismo en el personaje de Dani, y estuve pensando mucho en mi última relación, acerca de las relaciones en general, de la codependencia, y pensando en cómo podía hacer una película catártica sobre un quiebre amoroso que se sintiera satisfactoria y no solo pesimista.

-¿Cómo decidió que no quería generar terror en la oscuridad, sino que a plena luz del día?

-Fue bien al comienzo, cuando supe que iba a hacer un filme ubicado a mitad del verano. Eso se convirtió en parte de lo entretenido de hacerla y en parte del desafío. Fue una de esas cosas que cuando te das cuenta que podría funcionar, te lanzas hacia ello, porque sientes que realmente puede ayudar y alimentar a la cinta. Después hacerla fue un gran dolor de cabeza, porque estás persiguiendo el clima, persiguiendo el sol, filmando afuera, y apoyándote en la luz natural. Es muy difícil, especialmente cuando eres un cineasta que está acostumbrado a tratar de tener cierto control sobre la película. Es una lección de humildad estar a merced del clima.

-Midsommar a algunos les ha parecido una comedia negra. ¿Cómo trabajó el humor tanto en esta película como en Hereditary?

-Supe que la han considerado una comedia negra, es difícil de explicar. Para mí es una cuestión de no pensar tanto las cosas, permitiendo que el humor encuentre su camino, en vez de forzarlo. Hereditary no es graciosa, pero la película se desarrolla de una forma en que el humor se va incrementando. Usualmente me río mucho en el fondo de la sala de cine cuando veo pasar los últimos 30 minutos.

-¿Qué tan cómodo se siente al trabajar con grandes estudios o para un servicio de streaming?

-Preferiría no hacer películas con un servicio de streaming por ahora, porque creo en la experiencia del cine, y quiero que mis filmes lleguen a las salas antes de que vayan a otro lado. Y con respecto a trabajar con los estudios, no tengo interés en trabajar en grandes blockbusters. Yo no haría una película de Marvel, pero estoy interesado en trabajar con presupuestos más grandes, trabajar a una escala mayor. Quiero hacer lo mío, seguir haciendo filmes originales.

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