"No me incomoda que se mencione mi pasado en Huachipato"

Mario Parada reconoce con mucha naturalidad el desliz que cometió durante su presentación ante el plantel de Universidad de Concepción. Apenas asumía como presidente de la rama de fútbol del Campanil, cargo en el que sucedió a Mario Rodríguez, y quiso transmitir un mensaje motivacional a los jugadores, considerando la difícil situación que atraviesa el equipo de Francisco Bozán, que se mantiene en el último puesto de la tabla, con apenas 14 puntos.

Ese día, según reveló un testigo, Parada instó a los futbolistas a mejorar la campaña, pero con un lapsus que no pasó inadvertido, aunque nadie se atrevió a comentarlo. Les pidió a los futbolistas elevar su rendimiento en beneficio de... Huachipato. Su caso da para calificarlo como transfuguismo, pero durante toda esta entrevista el ahora directivo estudiantil intentará atenuar esa percepción.

"Se me salió la palabra Huachipato en la presentación con los jugadores. Lo reconozco, porque no es más que una anécdota. Y porque lo que vale es la razón y los sentimientos que tengo en la Universidad de Concepción, que son igual de fuertes. Soy exalumno de esta casa de estudios. Y mis hijos y mis hermanos también lo son. Hay un cariño grande por la universidad, que explica en gran medida por qué acepté el desafío", dice a La Tercera.

Al cargo llegó por expresa petición del rector Carlos Saavedra. Su caso es casi idéntico al del timonel del club, Daniel González, quien presidió a los acereros. Ambos compartieron la gestión en Huachipato. Incluso ambos se titularon en la Facultad de Ingeniería de la principal casa de estudios de la región del Bío-Bío. Y en lo laboral, porque siguen vinculados a la siderúrgica.

¿Cómo asume la responsabilidad de dirigir al fútbol del Campanil, sobre todo considerando el complejo momento del equipo?

Es un bonito desafío, que hay que tomarlo con mucho profesionalismo. Estoy ligado a la Universidad de Concepción desde hace 20 años, en el directorio corporativo. Entonces, también lo hago con mucho entusiasmo e identificación.

¿Por qué cree que el rector de la universidad les confía la responsabilidad de conducir al club?

Es por la historia, especialmente de Daniel. Estuvimos 20 años ligados a la gestión deportiva de Huachipato. Entonces, debe haber pensando en que podemos ser un aporte importante para la institución. Tendremos que trabajar para responder a esa muestra de confianza.

¿Haber estado por casi dos décadas en Huachipato es una ventaja para la tarea que inician ahora?

Evidentemente. Intentar traspasar esa experiencia a la gestión del club. No vinimos a hacer ninguna revolución, sino a apoyar una gestión que está en pleno desarrollo y que, durante todo este tiempo, ha resultado exitosa.

Hoy, sin embargo, el equipo de Francisco Bozán está colista.

Sí, pero los resultados de la gestión del club en todo este tiempo están a la vista. El fútbol ha tenido éxito. Ha sido animador de los campeonatos nacionales y ha tenido participaciones internacionales. Más allá de que hoy la posición en la tabla no sea cómoda, se ha hecho un buen trabajo. Por eso le decía que vinimos a apoyar una gestión. Eso hay que potenciarlo y para eso vinimos. Cuando fuimos a saludar a los jugadores les dijimos eso, que veníamos a trabajar y a apoyar.

¿Le genera conflictos estar al frente del fútbol de la Universidad de Concepción, después de haber ocupado el mismo puesto en Huachipato?

De ninguna manera. Le diría que el único conflicto es familiar. Mis hijos nacieron con Huachipato y siguen siendo hinchas del club. No sé cómo será la cosa cuando nos enfrentemos.

Y usted, ¿de qué equipo es hincha?

Yo fui hincha de Colo Colo y cadete de Antofagasta Portuario. Mucho después de eso me transformé en dirigente. Uno debe privilegiar la pasión por el fútbol y el deseo por engrandecerlo más que la condición de hincha. Hoy, Universidad de Concepción me ofrece una nueva oportunidad para trabajar por el engrandecimiento del club y del fútbol. Y vengo a aportar mi experiencia y entusiasmo, lo mismo que Daniel.

¿No le incomoda que se llegue a hablar de transfuguismo, como ha sucedido con otros dirigentes que han terminado cambiando de club, incluso por motivaciones económicas?

No. No me incomoda para nada que se mencione mi pasado en Huachipato, porque es una realidad. Y porque las motivaciones son totalmente distintas a las que usted menciona.