Cárceles lejos de las ciudades y cambios a Gendarmería: la propuesta de republicanos para cambiar el sistema penitenciario

Según se plantea en el documento, la sobrepoblación en las cárceles, el aumento de la inseguridad en su interior y la falta de infraestructura penitenciaria son algunos de los problemas que afectan a estos recintos en el país.


Cárceles alejadas de las ciudades, mejorar el programa de formación de gendarmes y terminar con el beneficio de libertad condicional para reincidentes. Esos son parte de algunos de los puntos de la propuesta que este lunes dio a conocer el Partido Republicano para modificar el sistema penitenciario en Chile.

El documento -que cuenta con 28 páginas- también hace un análisis de la actual situación carcelaria en el país. Así, asegura que materias como la sobrepoblación en las cárceles, el aumento de la inseguridad en su interior, la falta de infraestructura penitenciaria y el nulo impulso para generar nuevos recintos carcelarios concesionados aparecen como los principales problemas que se enfrentan actualmente.

“La nueva política penitenciaria que proponemos para Chile considera una agenda administrativa, reglamentaria y legislativa, que aborda distintos aspectos desde la construcción de penales para aumentar la capacidad carcelaria, el reforzamiento de la seguridad, las restricciones a los regímenes penitenciarios y un nuevo y reforzado rol de Gendarmería”, dijo a La Tercera la directora de Ideas Republicanas -centro de estudios del partido-, Carmen Soza.

En este contexto, en el escrito se plantean un total de nueve medidas centrales para modificar el sistema carcelario. El primero de estos apunta a aumentar la capacidad penitenciaria en Chile, pasando de 42 mil a 65 mil plazas, con la construcción de al menos 3 megacárceles para reclusos de alta peligrosidad y 7 recintos penitenciarios adicionales a los que existen actualmente.

En esa línea, una segunda propuesta plantea que estos nuevos recintos deben encontrarse alejados de las ciudades y contar con nuevas medidas de seguridad, como perímetros más amplios, mayor control de visitas, entre otros. Para esto se propone agilizar los procesos de licitación, revisando “los criterios y mecanismos de pago al concesionario, que incluye el estudio de un modelo similar al del pago de la subvención escolar”.

Al respecto, el presidente del partido, Arturo Squella, aseguró que “uno de los elementos fundamentales es recuperar el control total de lo que ocurre al interior de las cárceles. Para ello, proponemos la construcción de tres penales nuevos de máxima seguridad donde se pueda implementar el régimen penitenciario que rige en El Salvador o en Italia”.

Otra de las propuestas del partido apunta a establecer un régimen de trabajo para que quienes estén privados de libertad y no sean reincidentes puedan optar a programas de reinserción “tanto de empresarios internos y empresarios externos para conformar una alianza público/privada”.

Así también, el documento considera mejorar el programa de formación de gendarmes, enfocándolo en criminalidad organizada, pero sin descuidar la formación en derechos humanos. Por lo mismo, se propone reconocer a Gendarmería como una policía penitenciaria y, por lo tanto, como una fuerza de orden y seguridad. En esa línea, también se busca generar mecanismos de anticorrupción al interior de la institución, por medio de canales de denuncia y el resguardo de la identidad del denunciante.

Otros puntos que se proponen son hacer las cárceles más seguras y con mayor tecnología para controlar el acceso y las comunicaciones; establecer regímenes más estrictos y con mayor segmentación entre los reos, restringiendo visitas y haciendo obligatorio el uso de uniformes; revisar los beneficios y el cumplimiento alternativo de penas, digitalizando el sistema de control e implementado el modelo antimafias, y expulsar de forma inmediata a los inmigrantes irregulares que cometen delitos.

La carrera por las propuestas

La propuesta del partido liderado por Squella se da en medio de las gestiones también de Chile Vamos por liderar la agenda de seguridad.

En este contexto, la alcaldesa de Providencia y liderazgo presidencial del sector, Evelyn Matthei (UDI), ha asumido un rol más protagonista para impulsar una agenda en esta materia.

De hecho, según dio a conocer La Tercera, junto un grupo de expertos trabajó una propuesta con 14 áreas prioritarias en materia de seguridad ciudadana, donde figuran temas como fronteras, cárceles, expulsiones, confiscación de dinero y bienes mal habidos, además de inteligencia y redes internacionales.

En este contexto, también realizó una gira a Estados Unidos, donde se reunió con expertos en el área con el objetivo de fortalecer sus propuestas en seguridad ciudadana, que serían parte de los ejes claves de su programa de gobierno de cara a las elecciones del próximo año.

Además, se ha involucrado en la agenda legislativa, donde hace una semana junto al presidente de la Comisión de Seguridad Ciudadana de la Cámara de Diputadas y Diputados, Andrés Longton (RN), presentó proyectos de ley para endurecer penas a quienes cometan delitos de robos por sorpresa y para quienes huyan de controles de tránsito.

En republicanos, por su parte, su excandidato presidencial, José Antonio Kast, también ha realizado giras internacionales para revisar distintas medidas en torno al tema. Hace unas semanas viajó a El Salvador de Naybi Bukele para visitar la “megacárcel” que sirve para contener la violencia de las pandillas de ese país centroamericano y durante los últimos días ha sostenido en reiteradas ocasiones una propuesta para construir un muro en la frontera con Bolivia.

Esta propuesta relativa a seguridad, dicen en el partido, apuesta a que sirva de insumo para el programa de gobierno de Kast.

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