Cuando pauteamos este número, lo hicimos pensando en mostrar lo último en iluminación y tecnología. Hace poco se realizó la feria internacional Euroluce, evento en el cual todas las grandes editoras de diseño presentan sus últimos avances, y consideramos que era relevante hablar de ello; pero otra noticia ocurrida esta semana me obligó a cambiar el ángulo de este editorial.

Para que exista iluminación, inevitablemente tiene que haber electricidad asociada. Esta semana se aprobó la primera etapa del proyecto HidroAysén, megacentral que nos garantizará parte de la energía, de manera estable, para que sigamos creciendo como país.

¿Pero a qué costo?

Me resulta difícil tener una postura objetiva y definitiva sobre este tema: sí, necesitamos energía, pero ¿generada de qué forma? Las superficies inundadas por este grupo de centrales efectivamente se redujeron bastante si se compara con el proyecto original, pero el impacto que tendrá en la geografía y ecosistemas de la zona aún no está estudiado en profundidad. Estamos modificando de manera irreversible una de las zonas del planeta más puras y menos contaminadas. Después viene una herida de 2.200 km de largo para traer esa energía a Santiago, en que el cómo y por dónde aún no están definidos, pero que inevitablemente tendrá que construirse para completar el proceso.

¿Se considera efectivamente la totalidad de los factores antes de tomar una decisión de este tipo?

, ¿cuál es el marco legal existente que aprueba proyectos de esta magnitud, si en primera instancia recibió más de 2.700 observaciones y lo de hoy no difiere mucho del proyecto original?

En resumen,

¿cuál es la política energética que regirá en el país durante los próximos 50 años? ¿Hay alguien pensándola o definiéndola?

Se aprueban Castilla e HidroAysén y se rechaza Barrancones. Ventanas-Puchuncaví contamina desde hace años a vista y presencia de todos inutilizando tierras que históricamente habían estado dedicadas a la producción de lentejas.

Quizás una editorial de este tipo no debería estar en una revista de diseño y decoración, pero el buen diseño también involucra un buen manejo de estrategias y de planes de acción, por ello me tomo la libertad.