Uno de los automóviles más emblemáticos del cine es el DeLorean de &"Volver al Futuro&". El mítico vehículo en el que Marty McFly se desplazaba en el tiempo estaba basado en un DMC-12, un modelo que remeció la escena cuando apareció en 1981 con su diseño futurista que rompía esquemas. Dicha unidad disponía de una estructura monocasco que combinaba acero con fibra de vidrio, aleación que años más tarde muchos fabricantes buscarían para bajar el peso de las carrocerías (tomando eso sí la fibra de carbono como elemento). Con puertas que se abrían igual que las del Mercedes 300 SL, tenía la intención de competir contra los Corvette o los Porsche 911, sin embargo, el DeLorean sufría por una motorización 2.8 V6 de origen Renault que desarrollaba 130 CV de potencia, los cuales eran insuficientes para dar una buena batalla.

Pues bien, hoy ese modelo que buscaba revolucionar la industria vuelve a hacer noticia debido a que la versión que el mismísimo dueño de la compañía, John DeLorean, le regaló a su esposa, la modelo Cristina Ferrare, sale a remate en la casa alemana Auctions. Es cierto que no cuenta con el condensador de flujo que permitía el traslado temporal, pero por otra parte sólo cuenta con 20 mil kilómetros recorridos en más de 30 años.

La verdad es que el DeLorean fue un absoluto fracaso. La compañía bajó sus puertas en 1983 y recién dos años después, cuando Robert Zemeckis lo lleva a la pantalla grande, comienza a transformarse en símbolo de la cultura pop. Hoy es una pieza de colección, por lo mismo, el precio mínimo que se espera es de 34 mil euros, poco más de 24 millones de pesos.