Gustavo Petro convoca a marchas para respaldar su propuesta de reforma a la salud

Presentado este lunes, el plan del primer presidente de izquierdas en la historia de Colombia significa una transformación total del sistema que opera en la actualidad, lo que ha generado resquemores entre la oposición. Para apoyar su reforma, el mandatario llamó a marchas en todo el país, en la búsqueda por presentar un respaldo ciudadano previo a la discusión en el Congreso.


Cuando Gustavo Petro llegó a la Casa de Nariño, hace más de seis meses, lo hizo bajo una promesa: cambiar el modelo que hasta antes de su arribo a la presidencia imperaba en Colombia, al ser el primer mandatario de izquierda en el país. Y este lunes, dio un importante paso en su cometido al presentar su controvertido proyecto de reforma a la salud, el que ya ha generado detractores entre la oposición y dentro del propio gobierno.

Para validar su postura, tanto el mandatario como Pacto Histórico, bloque político al que pertenece y que lo llevó al poder, convocaron marchas para este martes en apoyo del líder y su reforma. En un intento por conseguir respaldo popular, las manifestaciones fueron realizadas en distintas ciudades del país, incluidas Cali, Barranquilla y Bucaramanga, las que se desarrollaron con normalidad durante la tarde, según reportó el medio colombiano El Tiempo.

En un acto previo al envío del proyecto al Congreso, el mandatario aseguró que “entramos a las reformas sociales sustanciales”. Con miras a prevenir y tratar a tiempo las enfermedades, aumentar la cobertura, subir los salarios de los trabajadores del sector y combatir la corrupción a través de la eliminación de intermediarios para el pago de remuneraciones, el proyecto ha enfrentado críticas por buscar eliminar la actual estructura del sistema para cambiarlo por completo.

“Queremos que un médico pueda ir a cualquier lugar del territorio nacional y atender a cualquier persona, que el territorio se pueda organizar de tal manera que sus gentes, sus habitantes, puedan ser atendidos de manera permanente por equipos de salud profesionales”, defendió Petro en el acto.

Los objetivos del primer gran proyecto del mandatario serían lograr un sistema donde se cierren las brechas sociales y territoriales, con el fin de que no exista distinción entre clases sociales, económicas, culturales, regionales o de cualquier otra índole, explicó Reuters. Según Petro, el proyecto busca lograr que la salud sea derecho universal en el país, en desmedro de lo que él califica como un “negocio”.

El Presidente de Colombia, Gustavo Petro; a la derecha, la ministra de Salud, Carolina Corcho; en el centro, la vicepresidenta de Colombia, Francia Márquez, muestran una copia de un proyecto de ley para reformar el sistema de salud. Foto: AP.

En detalle, la reforma tiene como su pilar el que los recursos públicos destinados a salud sean administrados por una entidad pública, lo que guarda directa relación con el actual sistema de prestación de servicios en el país, el que se divide en dos organismos fundamentales: las EPS y la Adres.

Colombia cuenta con una figura llamada Entidades Promotoras de Salud, más conocidas como EPS. Dichas instituciones son las encargadas de la afiliación, registro y atención de los afiliados al sistema de salud, explicó CNN, además de recaudar el dinero de las cotizaciones laborales. En otras palabras, las EPS se encargan de la salud de quienes pagan por la seguridad social.

Actualmente, 16 de ellas se encuentran en proceso de liquidación, según datos de la Superintendencia de Salud de Colombia, argumento del cual el gobierno de Petro se afirma para asegurar que muchas EPS son insolventes y viven con déficit financiero, arriesgando la salud de millones de colombianos al tener que dejar de atender al público.

“La realidad es que si se liquida alguna de esas EPS, hay que hacer un traslado masivo a las EPS que sí cumplen los indicadores y (si se recarga una EPS) se desploma el sistema, se tienen que declarar en insolvencia. Es decir, es un castillo de naipes que no es nuevo”, dijo la ministra de Salud, Carolina Corcho.

La Administradora de los Recursos del Sistema General de Seguridad Social en Salud, o Adres, es quien recibe la factura de cobro que una EPS emite luego de prestar sus servicios de salud, ya sea una cita al médico general, especialidad u ortodoncia.

Es la Adres la encargada de recolectar el dinero, incluyendo el que entra a través del Estado en forma de impuestos; los parafiscales, ya sean aportes de salud individuales o de empresas, y los recursos del Sistema General de Participaciones. Luego, es este mismo el ente que realiza los pagos a todo el personal de salud, incluidos enfermeros y médicos, lo que se traduce, según la visión de Petro, en la entrega de dinero público a privados.

La ministra Corcho, deslizando el problema de corrupción que puede acarrear el sistema, afirmó que “tenemos un sistema en donde el Estado perdió el control de millonarios recursos públicos. Después de que esos recursos entran al fondo Adres, que es el gran recaudador, salen a un administrador particular y de ahí para adelante no sabemos”.

El cambio propuesto por la reforma explicita que el fondo Adres continuará recibiendo el dinero, pero la entrega no se hará directa al personal de salud, sino que se entregará a hospitales y clínicas, y serán estas dos últimas las que pagarán las remuneraciones a sus empleados.

Inicialmente, el mandatario propuso directamente la eliminación de las EPS con participación privada para dejar la administración del sistema a cargo de los municipios y departamentos, explicó Reuters. Sin embargo, el gobierno desistió de aquello ante críticas que advertían que la atención quedaría solo en manos de los grandes hospitales, los que no tendrían la capacidad para atender a tantos pacientes.

Desde la Asociación Colombiana de Empresas de Medicina Integral (Acemi) defendieron a las EPS, afirmando que “con recursos limitados hacen uso eficiente de los recursos para que todos los colombianos estén cubiertos en salud, independientemente del tratamiento que se necesite”.

Simpatizantes del Presidente colombiano, Gustavo Petro, se manifiestan a favor de los proyectos de reforma previstos para su gobierno, con imágenes alusivas al Che Guevara. Foto: REUTERS.

Otro de los pilares de la reforma hace alusión a la creación de un modelo de atención primaria donde todos los colombianos tengan acceso a consultas de urgencias, atención de medicina general y una sala de partos, explicó CNN. Idea que busca solucionar especialmente el problema rural, los sectores alejados del país y los barrios pobres de las grandes urbes. Cifras del gobierno aseguran que de casi 1.100 municipios, hay 600 sin sedes de salud en zonas rurales, mientras que 183 de ellas solo cuentan con una sede para toda la comunidad.

Un tercer y último eje guarda relación con la “dignificación” de los trabajadores de la salud, en palabras del oficialismo. Política que se traduce en lograr mejores salarios para el rubro, ya que “el personal que cuida la vida no puede estar precarizado”, aseguran desde el gobierno.

Para aquello se creará una escala salarial del contrato laboral de enfermeros y médicos, con el fin de que trabajen sin exclusividad, detalló CNN. La aplicación de esto “será gradual” y “en el nivel primario”, por lo que los primeros beneficiados serán enfermeros y auxiliares de enfermería, quienes perciben los sueldos más bajos del área.

Entre las críticas, destacó la falta de debate y socialización del texto final, informó el mismo medio. Sin embargo, destacaron por la cercanía los reparos de Roy Barreras, presidente del Senado y gran aliado de Petro, y el de Alejandro Gaviria, actual ministro de Educación y exministro de Salud durante el gobierno de Juan Manuel Santos.

Barrera cuestionó la propuesta inicial de la eliminación de las EPS, afirmando que “eso hay que mejorarlo, corregirlo”. En conversación con la revista Semana, el legislador aseguró que “eso no se hace destruyendo un sistema de información, de calidad, de administración de riesgos que tiene 30 años”.

Gaviria, por otro lado, dijo a El Tiempo que sus opiniones fueron escuchadas respetuosamente, pero que no fueron tenidas en cuenta “de manera suficiente” en el texto final. “No voy a renunciar. Yo tengo una responsabilidad y un agradecimiento con el Presidente Petro y voy a continuar aportando para ayudar a construir una sociedad mejor”, dijo al medio colombiano.

Buscando respaldo ciudadano

Para lograr sustento entre las bases político, sociales y ciudadanas, el Presidente Gustavo Petro convocó a manifestaciones pacíficas, en un intento por legitimar su reforma ante un Congreso que debe apoyar la reforma.

Si bien puede resultar curioso que un mandatario llame a marchas durante su propio gobierno, Carlos Arias Orejuela, analista político y docente de la Universidad Externado, aseguró a The Associated Press que, en el caso de Petro, esto responde directamente a su “personalidad política”.

Simpatizantes del Presidente de Colombia, Gustavo Petro, previo a una declaración pública del mandatario sobre la reforma del sistema de salud. Foto: REUTERS.

“Esto genera un ejercicio de presión y de legitimación de las reformas para que él (Petro) tenga una moneda de cambio frente a los congresistas”, dijo a la agencia de noticias.

Fue mediante su propia cuenta de Twitter donde el mandatario hizo llamados a la gente a movilizarse en favor de su gobierno, espacio en el que retuiteó numerosas muestras de apoyo de asistentes y políticos oficialistas durante la tarde.

Cerca de las 17:00 hora local, Gustavo Petro se dirigió a sus seguidores en la Plaza de Bolívar, momento en que afirmó que “el cambio fue la palabra central de la campaña presidencial, fue por lo que Colombia escogió este Gobierno, no puede ser un cambio de mentiras, de maquillajes, solo si el pueblo abandona su gobierno es que el cambio puede detenerse”, en referencia a los argumentos para hacer un cambio de tal magnitud bajo su gobierno.

“Hoy sabemos que el cambio significa cambiar eso, salir de las ideologías fundamentalistas, pasar a construir otro camino. El bienestar social no pasa por hacer negocios desde el Estado, el bienestar social se construye si garantizamos Derechos Universales”, continuó el mandatario.

Diversos medios locales aseguraron que si bien hubo bloqueos en algunas vías de las ciudades importantes, estos fueron pacíficos y no se necesitó de la intervención policial para su disipación. Muchas de ellas contaban con permiso para utilizar la calzada en determinadas horas del día. También se presentaron detenciones momentáneas en estaciones de TransMilenio, la red de transporte vial de Bogotá.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.