Fuertes declaraciones hizo la ex rehén Ingrid Betancourt durante una extensa entrevista con el conocido comunicador Larry King. En ella, la ex candidata presidencial colombofrancesa se refirió a su paso por la selva y los casi siete años que estuvo en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (Farc). Sin embargo, declinó entregar detalles sobre "Emmanuel", el hijo de la también ex rehén Clara Rojas, nacido en cautiverio y sobre el posible abuso sexual del que fue víctima, afirmando que "no voy a responder a esa pregunta (...) hay cosas que deben quedarse en la selva", dejando entrever lo certero de esa posibilidad, tras lo que agregó que todos los rehenes fueron objeto de torturas físicas y mentales.

La ex candidata afirmó que estar cautiva en la jungla fue como estar "en el infierno" y que cuando fue secuestrada siempre pensó que se trataría de "unos tres meses como máximo. Nunca imaginé que iniciaba un camino que duraría casi siete años (...) Usted es una mujer libre y, a continuación, se convierte en un preso que recibe todo tipo de ordenes. Siéntate aquí, de pie allí. Eso es todo. Finalmente, no se tiene ni siquiera la posibilidad de mover el bolso sin tener que pedir permiso".

Betancourt narró también pasajes de su intento de fuga con Eladio Pérez así como su posterior captura, sobre la que se limitó a decir que "fue horrible. no estaba preparada para eso". Además, confesó que durante su cautiverio estaba consciente que los rebeldes debían asesinarla ante cualquier intento de rescate. "Supe que tenían órdenes y que si yo era objeto de un rescate, tenían ordenes de matarme".

Consultada sobre si volvería a la política, indicó que "quiero estar disponible" para "servir", aunque aclaró que "no estoy diciendo que no vaya a pasar, sólo estoy diciendo que eso no es mi prioridad".

Por último, aseguró que no guarda odio contra las Farc y que lo que más la marcó de su paso por la jungla es darse cuenta lo cruel e inhumanos que puedes ser algunos hombres contra otras personas.