Durante este sábado, Estados Unidos, lanzó una serie de nuevos ataques aéreos en el norte de Irak, según informó el Pentágono.

Este viernes comenzaron los bombardeos de Estados Unidos en Irak desde la partida de sus  tropas, hace tres años, y destinados a contener el avance de los yihadistas,  que amenazan con ganar terreno sobre Kurdistán y matar a miles de civiles  yazidis, una minoría no islámica, en los alrededores del monte Sinjar, uno de  sus bastiones.

El primer ataque, alrededor de las 15H20 GMT, se llevó a cabo por medio de  una combinación de cazas y drones, y se centró en blindados de transporte de  tropas, uno de los cuales fue destruido, señaló en un comunicado el Comando Central de Estados Unidos, que cubre el Medio Oriente.

Veinte minutos más tarde, un avión estadounidense volvió a atacar a los yihadistas y habría destruido dos blindados y un camión. 

Cerca de las 19H00 GMT otro aparato estadounidense habría aparentemente destruido otro blindado de transporte de tropas en la proximidad de Sinjar.

El viernes, dos ataques aéreos destruyeron un puesto de artillería del EI,  matando a un equipo de morteros.  

El avance del Estado Islámico lanzó a las rutas a decenas de miles de personas,  especialmente cristianos y numerosos integrantes de la minoría kurdoparlante  yazidi.

El viernes aviones estadounidenses e iraquíes lanzaron víveres para  abastecer a "miles de ciudadanos" amenazados por los yihadistas en el monte  Sinjar, entre la ciudad de Mosul y la frontera siria.

Gran Bretaña anunció como inminente una operación similar, y Francia dijo  que enviará equipos de primeros auxilios a la zona "en las próximas horas".