Peter Crouch ya pasó a la historia. No por sus goles, sino que por ser el jugador más espigado que ha vestido la camiseta de la selección inglesa. Con 1,98 metro y apenas 70 kilos, el actual atacante del Portsmouth se hizo mundialmente conocido al formar parte del plantel que disputó el Mundial de Alemania.

Crouch es un jugador cuestionado, dada su limitada técnica con el balón, pero de un juego aérea importante. Debutó en el Queens Park Rangers y luego fue comprado por el Portsmouth. Tras una notable campaña firma en el Aston Villa.

El "Flaco" no tuvo un bien comienzo y después jugó a préstamo en el Norwich City y el Southampton. Luego fue contratado por el Liverpool, donde tuvo buenas actuaciones, pero nunca fue titular indiscutido. Llegó en el Mundial de Alemania y esta temporada regresó al Portsmouth en calidad de estrella.

Hace dos años, Crouch dejó sólo de pensar en la pelota y mantiene una relación con una de las modelos más sensuales de Inglaterra, Abbey Clancy, de 22 años y 1,75 metro.

Se conocieron en un bar de Liverpool y desde ahí han sido inseparables.

En todo caso, la carrera de Clancy ya iba en ascenso antes de relacionarse con el futbolista. Cuando pequeña había integrado un grupo musical, pero sin mayor fortuna.

El año que conoció a Crouch, la maniquí participó en el reality Britain's Next Top Model, donde pese a ser segundo, logró hacerse conocida en todo el país. Desde esa fecha se ha dedicado a modelar lencería y a copar las portadas de las revistas más importantes de la moda británica. Este mes, de hecho, destaca en la portadade la revista FHM, donde realizó una llamativa sesión fotográfica.

Para conocer el especial atractivo de Abbey Clancy, visite la galería La sensual modelo de lencería que enamoró a Crouch, en LaTercera.com.