En una tierra con un invierno tan corto,como es el caso de Chile, Antonia Yáñez, la joven snowboardista criolla que marcó un inédito séptimo lugar en unos Juegos Olímpicos de la Juventud de Invierno, tiene poco tiempo y lugares para entrenar.

Durante el año aprovecha que vive en Pichilemu y pasa las tardes surfeando. Pocos creerían que la verdadera actividad de esta chica de 16 años está en las montañas. Las de El Colorado y las que están más lejos, en Europa, donde busca nieve durante el verano chileno. “Me encanta Europa, he sido muy afortunada de tener la oportunidad de conocer muchos lugares”, confiesa.

Yáñez pasó a segundo medio en el Liceo Agustín Ross Edwars, al que asiste los dos primeros y los dos últimos meses de año, y confiesa que le encanta pasar tiempo con sus amigos y familia: “es lejos lo que más me gusta hacer”. Se sabe parte del Team FYL (Familia Yáñez Lasalvia), pues todos sus cercanos realizan deportes, y lo dice porque sabe que no durará para siempre, que para destacarse en el snowboard mundial conocerá los sacrificios.

Ya los ha vivido. El último fue viajar por primera vez sin su familia a Noruega, sede de la cita invernal de este año, donde fue séptima en bordercross, marcando la mejor participación nacional en la historia de estos Juegos, que partieron hace cuatro años. Eso, pese a que su especialidad es el slopestyle, en que el año pasado fue octava en el Mundial Juvenil de China.

Antonia aprendió a deslizarse en la tabla cuando tenía tres años. “Fue en Pucón. Mi papá me enseñó, porque a él le encantaba”, recuerda.

Ayer, desde su escala en Londres camino a casa, la deportista se atreve a asegurar que hará del deporte de invierno su vida. “Para allá voy, hacia el profesionalismo”, asegura. Y agrega que pese a los logros anteriores, el paso por Noruega no se olvidará: “Lillehammer fue la competencia más importante que he tenido en mi vida, estas dos semanas me marcaron y significaron mucho para mí”.

Sobre el séptimo puesto y el décimo en slopestyle, asegura: “Sé que me pudo haber ido mejor, tenía más que mostrar, pero estoy feliz sabiendo que las chicas están a mi nivel y que no me quedo atrás, pero tengo que seguir trabando mucho”.