Lucas Pouille está disfrutando su momento. El francés de 22 años, número 52 del mundo, está a un partido de poder jugar su primera final en un torneo de Masters.

Esto, luego de entrar al cuadro principal como "lucky loser" (perdedor afortunado), tras la retirada de su compatriota Jo-Wilfried Tsonga, uno de los cabezas de serie exentos de jugar la primera ronda del torneo.

Poullie había eliminado en dos sets de 6-4 y 6-1 a David Ferrer en los octavos de final, consiguiendo el mejor resultado de su carrera al acceder a los cuartos de final.

De esta forma, se ganó la opción de pelear con Juan Mónaco el paso a las semifinales. Sin embargo, el tenista argentino debió dejar la competencia por una lesión en la cadera, dándole el paso al deportista francés.

De esta manera, Lucas Pouille espera a su próximo rival que saldrá de la llave que tendrán que resolver David Goffin y Andy Murray.

La próxima semana, el afortunado tenista ingresará por primera vez al top-40 del Ránking ATP tras su gran paso por la competencia.