El 12 de junio de 2009, la selección chilena sub 21, dirigida por Ivo Basay, se consagró en el torneo Esperanzas de Toulon, un clásico torneo juvenil en el que han participado algunas de las principales figuras del fútbol mundial.

A ocho años del título obtenido por la Roja, muy pocos integrantes de aquel equipo han logrado desarrollar una carrera de éxito en el fútbol profesional. Actualmente, además, apenas tres jugadores que fueron campeones en Francia integran el seleccionado adulto.

Los arqueros del equipo eran Cristopher Toselli y Raúl Olivares. El primero ha sabido consolidarse como titular en la Universidad Católica pese a que, a sus 28 años, ha convivido toda su carrera con la posibilidad no concretada de jugar en el extranjero. Hoy es el tercer arquero de la Roja de Pizzi que disputará la Copa Confederaciones. El segundo, en tanto, ha desarrollado una carrera de pocas luces, aunque hoy está consolidado como titular en el Jorge Wilstermann boliviano.

Entre los defensores, sólo Eugenio Mena ha logrado sobresalir. Tras ser figura en la U de Sampaoli, partió a Brasil donde, tras cuatro años, ha jugado en Santos, Cruzeiro, Sao Paulo y Sport Recife. Está actualmente en Rusia para jugar la Confederaciones. Otros como Juan Abarca, Agustín Parra y Bastián Arce han militado sólo en Chile con regulares rendimientos. Mientras que Carlos Labrín, Nelson Saavedra y Paulo Magalhaes gozaron de oportunidades en el extranjero, pero nunca encontraron la verdadera consolidación y se vieron forzados a regresar al país.

En el mediocampo, únicamente Cristobal Jorquera ha mantenido una regularidad que le ha valido permanecer hasta ahora en Europa. Actualmente milita en el Bursaspor turco, donde es una de las figuras del equipo. Mientras, Luis Pavez, Marco Medel y Rafael Caroca consolidaron sus respectivas carreras en Chile. Hoy, sin embargo, Pavez está en el ascenso mexicano. Mientras que Medel en O'Higgins y Caroca tiene todo listo para reforzar a la Universidad de Chile. En tanto, José Barrera nunca despuntó y ha construido una trayectoria en equipos de segundo orden. Actualmente milita en Rangers, tras pasos por La Calera, Magallanes y Santiago Morning, entre otros.

En la ofensiva, Eduardo Vargas es el único que se ha mantenido en el primer nivel de competencia. Pese a que, salvo en Universidad de Chile y en cierta medida en Gremio, nunca ha rendido a cabalidad en sus clubes (Napoli, Valencia, QPR, Hoffenheim y Tigres), se ha convertido en uno de los delanteros más importantes de la historia reciente del fútbol chileno. Disputará la Confederaciones con la Roja, donde es el cuarto máximo anotador histórico, con 32 goles.

El resto de los arietes de ese equipo, Michael Silva, David Llanos, Mauricio Gómez y Gerson Martínez nunca lograron el despegue definitivo y han tenido que conformarse con irregulares participaciones en diferentes equipos de Chile.

Finalmente, el DT Ivo Basay, no dirige desde el Clausura 2014-2015 cuando dejó Ñublense tras una magra campaña. Además del título de Primera B obtenido con Santiago Morning en 2005, el Esperanzas de Toulon, que hoy cumple ocho años, sigue siendo su máximo logro como adiestrador.