Produjo a Happy Mondays, introdujo a Beastie Boys en el Reino Unido, fue requerido para los soundtracks de las cintas Swordfish y Otro día para morir, le dio una cara electrónica a gente como Elvis Presley y Led Zeppelin, inauguró el mítico club londinense Ministry of Sound y fue elegido por U2 para abrir la gira mundial del disco Zooropa (1993). Unos cuantos datos del recargado currículum de Paul Oakenfold (44) bastan para justificarlo como el dj más respetado del mundo.

El último ejemplo del prestigio del productor y dj inglés es el llamado de Madonna para que abriera varias de las fechas de la gira Sticky & Sweet Tour,  que parte hoy en Cardiff, Gales. Detrás de las bandejas ocupará ese mismo rol el miércoles 10 diciembre, minutos antes de la esperada aparición de Madonna sobre el escenario del Estadio Nacional.

No será un asunto nuevo para el hombre que ha pinchado discos en grandes estadios, en los clubes de electrónica más importantes del mundo y lugares más exóticos como la Muralla China. En 2006, el set electrónico de Oakenfold abrió fechas del tour anterior de Madonna en Europa y Asia. Su relación con Madonna parte cuando ella lo llama para reversionar en formato electrónico What it feels for a girl, incluida en el disco Music, de 2000. Luego sucede lo mismo con las canciones American life y Hollywood (ambas de 2003) y Sorry (2005).

"Siento como si ya lo hubiera hecho todo como dj... He pinchado en estadios, he sido telonero de U2 y Madonna, he liderado festivales. Disfruto mucho pinchando, pero no del cansancio de tanto viaje", ha dicho el londinense que llegará por quinta vez a Chile tras debutar en 2003 en Espacio Riesco. La última visita fue en abril para una fiesta que también contó con Underworld.