Un nuevo utensilio casero, capaz de reconocer horarios de mayor consumo de energía, e incluso alertar interrupciones de suministro en la red, arribó al país. Específicamente a la comuna de Valparaíso, que junto con Quilpué, serán pioneros en el control de gasto de electricidad, pudiendo redundar esto en una disminución de la cuenta de la luz.

El proyecto, desarrollado por la empresa Chilquinta, en esta primera etapa considerada a mil familias. Se trata un medidor "inteligente" o "Smartmeter" que registra diversas variables eléctricas, en intervalos de 15 minutos, y que tiene la capacidad  de transmitir esa información a un recolector de datos mediante una tecnología de radiofrecuencia.

Con esto se jubila el proceso de lectura mensual para la facturación de los consumos de los clientes.
El aparato puede generar alertas de interrupciones de suministro, las cuales llegan directamente al centro de comando de la empresa y se incorporan al flujo de atención de la guardia de emergencia, lo cual también ayudaría a que los tiempos de atención a las fallas sean menores.

El proyecto "Eficiencia energética para la V región", considera además cambiar refrigeradores ineficientes, por los de calificación A+ o A++,  para lo cual los clientes recibirán un bono de 150 mil.
El plan piloto fue patrocinado por el Ministerio de Energía, repartición que espera que en un futuro todas las casas puedan contar con una medición moderna de consumo.

"Tenemos la cuenta de luz más cara de Latinoamérica, así es que estamos muy contentos con esta iniciativa, porque nos va a permitir saber a qué hora del día es el mayor consumo. Por ejemplo, si sale que es más barato en la mañana, será cuando hay que lavar la ropa y se programa la lavadora. Los medidores gratuitos, ayudarán en eficiencia energética y en función de los resultados, vamos a poder hacerlo extensivo para todos los clientes", señaló el ministro del ramo, Máximo Pacheco.

Marcelo Luengo, subgerente general de la compañía, indicó que “la iniciativa nos permite pasar del discurso a la acción y lo convierte en pionero en materia de eficiencia energética, pues se trata de un piloto que va en beneficio directo de las familias”.

Arturo Herrera (86), de Quilpué, fue el primer beneficiado, y muestra con orgullo su nuevo refrigerador, el que asegura “me bajará la cuenta hasta en 6 mil pesos, ya hice el cálculo”