Fue su confidente durante sus días de gloria y sobreexposición. El hombre al que Michael Jackson le confió parte de sus mayores temores, sus grandes miedos.

El rabino Shmuley Boteach, de gran popularidad en Estados Unidos, ha dejado atrás cualquier secreto de confesión y ha optado por revelar en detalle las conversaciones que mantuvo con el fallecido Rey del pop en los 80.

El libro precisamente se llama Las confesiones de Michael Jackson y el diario español El Pais ha publicado un avance de sus pasajes más destacados. En sus páginas, el gurú espiritual centra gran parte de la historia en las cinco mujeres que marcaron la existencia del cantante y que ayudaron a configurar su extraño perfil: Elizabeth Taylor, Shirley Temple, Madonna, Lisa Marie Presley y Brooke Shields.

Con Shields, por ejemplo, el texto cuenta que en un momento tuvieron un acercamiento muy íntimo en la habitación del hombres de Thriller, pero él desistió de algo más. Se vio muy sobrepasado por el momento y por la actitud de Shields. "Entre en pánico, debería haber sido más valiente", le confesó el cantante al rabino. Además, Jackson no duda en recalcar que Shields fue el mayor amor plático de su vida.

Boteach, luego de experiencias como esta, llega a la conclusión de que su ahijado espiritual es inmaduro en el plano sexual y afectivo.

También cuenta que el hombre de Bad reaccionó igual de incómodo ante los requerimientos sexuales de la provocativa Madonna. "¿Qué te parecería si te llamara por teléfono para contarte que tiene los dedos entre las piernas? A mí me lo hacía y yo le contestaba "¡Ay, Madonna, por Dios!", y ella me salía con "cuando colguemos, quiero que te toques pensando en mí", habla Jackson en el texto.

Jackson tenía claro su ideal femenino. "Las que tenían clase y eran discretas y no pensaban sólo en el sexo y toda esa locura, porque eso no es lo mío", decía. Y a esos requerimientos parecía ajustarse perfectamente la princesa Diana de Gales, a la que nunca se atrevió a revelarle la veneración que sentía por ella.

De Lisa Marie Presley, la hija de Elvis, dice que "era genial" aunque ambos discutían a menudo por sus hijos, y a Elizabeth Taylor le unía el hecho de que entendía "el mundo de donde yo vengo. Nos comunicamos sin decir una sola palabra".

Con respecto a otras relaciones en su vida, como con su padre, el norteamericano asegura que quedó traumado cuando su padre se burló de él por su nariz."No se dio cuenta del daño que me hizo con aquel comentario. Me hizo tanto daño que quería morirme", confesó el cantante.

Respecto a la cuestionada relación que mantenía con los niños, Michael Jackson comentó: "recibo amor a través de la alegría y la ilusión que veo en los ojos de los niños. Ellos me han salvado la vida, así que quiero devolverles el favor".

El libro saldrá a la venta en febrero en España.