El fútbol suizo representa un umbral en la carrera de dos piezas clave de la Selección, pues fue en Servette, uno de los clubes más tradicionales de la liga helvética, donde Jean Beausejour y Jorge Valdivia forjaron importantes aspectos del nivel que hoy pueden mostrar en la "Roja".

La historia los une en junio de 2004, cuando el "Mago", tras un desafortunado paso por el Rayo Vallecano, de la Segunda División española, parte a préstamo a Ginebra. Allí se encontraría con un club en profunda crisis económica, que tenía como única misión mantener la categoría.

Aparte de los números rojos, el "Mago" encontraría en el Servette a Jean Beausejour, quien llegó a Europa con la ilusión intacta de hacer explotar el alto nivel mostrado en Universidad de Concepción.

Con el extraño escenario de acumular cuatro meses de sueldos impagos en uno de los países más ricos del mundo, llegó la quiebra de la institución y el descenso automático a Tercera División. Sin embargo, los chilenos habían cumplido con la meta de dejar al club fuera de los puestos de descenso. Paolo Collaviti, arquero de aquel equipo, recuerda a los nacionales como "dos grandes jugadores, de una buena mentalidad futbolística. Valdivia era un jugador con mucho talento, de grandes condiciones, lo que mostró desde muy joven. Lo encuentro uno de los grandes volantes del mundo y lo veía siempre cuando se fue a Brasil. Estoy seguro de que llegará a un grande de Europa. Beausejour, es de otro estilo: un jugador muy veloz, con mucha fuerza".

El portero, que actualmente se desempeña en el Young Boys, destaca la importancia de sus ex compañeros en la selección chilena e, incluso, aventura un resultado para hoy; "Ambos son parte importante del equipo de Chile. Si me preguntan, yo creo que le ganan 2-0 a Suiza", afirma.

Otro que recuerda el paso de los chilenos por Ginebra es Diego Sessolo, ex técnico de las filiales de Servette. "Uno se siente orgulloso al verlos ahora en el Mundial, porque ambos son grandes jugadores. Tengo un muy buen recuerdo de ellos", dice.

Para Sessolo, Valdivia caló hondo en Servette, ya que "era uno de los preferidos de la hinchada, porque tiene gran calidad técnica. Muchas veces comentó que le hubiera gustado quedarse acá por muchos años, pero lástima que el equipo se fue a la quiebra. Recuerdo una vez que marcó un gol en el último minuto y se sacó la camiseta, paseándola en el banderín del córner por todo el estadio".

Ante Chile, Suiza no tendrá ningún jugador de Servette en cancha, lejos de los gloriosos tiempos en que la escuadra era formadora de estrellas mundialistas.