Después del exitazo que ha supuesto para Quentin Tarantino su más reciente película "Bastardos sin gloria", el destacado realizador anunció que no cesará en la exploración de los personajes que creó para esta ocasión.

Uno de sus próximos proyectos será una cinta que continúe adentrándose en las interioridades de cada personaje, a los que comenzó a darles vida hace 10 años, cuando escribió los primeros bocetos del guión de la película.

"Pudiera hacer una precuela a la película o una secuela, no lo he decidido aún, pero estoy realmente muy intrigado en llevar a los personajes ya sea a dónde fueron después de aquí, o cómo llegaron hasta aquí", expresó el realizador en una rueda de prensa antes del estreno de la cinta, que abre el VII Festival Internacional de Cine de Morelia. Y es que a su juicio "cada personaje tiene sus razones" para hacer lo que hace.

"Tengo el lujo y el privilegio de que nunca los juzgo... no puedo hacerlo, yo los creé y tengo un cierto amor por ellos", manifestó.

Y en un país donde la violencia es la orden del día, con reportes de decenas de asesinatos diarios, Tarantino se vio obligado a defender una vez más el uso de violencia para llevar su mensaje.

"Para mí las películas son sólo películas, los filmes son una forma de arte y si la violencia forma parte de tu color como artista, entonces es más bien algo estético. Usted puede verla o no verla", afirmó en la conferencia, acompañado del actor Eli Roth.

No obstante, dijo entender que para muchos mexicanos la violencia no se trata de algo estético porque tienen que lidiar con ella de manera muy cercana. Además aseguró tener una mezcla de "empatía y fascinación" por esta realidad.

Según su forma de evaluar el asunto, no hay absolutamente ninguna hipocresía o contradicción en "amar la violencia en las películas, pero no en la vida real" y recordó que libros como la Biblia son realmente cruentos y nadie se escandaliza.

Sobre la longitud de los diálogos explicó que fue un recurso que utilizó con toda la intención de "estirar el suspenso".

En una de las escenas en que hay infiltrados estadounidenses en una taberna llena de soldados nazis, y es obvio que algo está a punto de salir mal, los personajes se enfrascan en un juego de cartas y un intercambio de opiniones deliberadamente largo, antes de que estalle una escena, por supuesto, violenta. "Hice todo lo posible por alargarla", afirmó con orgullo.

Como ya había adelantado, el director estadounidense también hará una tercera parte de "Kill Bill, una historia en que una mujer busca vengar la muerte de su novio, asesinado el día de la boda. No obstante, Tarantino esperará a que se cumplan 10 años del estreno de la primera cinta, en el 2013, para "dejar descansar a la novia".

Por lo pronto, el realizador de "Pulp Fiction", y "Reservoir Dogs" dijo que entre sus planes también figura hacer una película sobre el viejo oeste porque es uno de los géneros a los que quiere rendirle homenaje como ya lo ha hecho en otras ocasiones con otros estilos.

"Creo que hay cierta familiaridad en mis películas con respecto a otros géneros, pero tiendo a pensar que lo que hago es reimaginar un género que me gusta, y que lo hago para una nueva era, lo hago para un nuevo público pero lo hago a mi manera".