Cerca de las 09.00 de Chile el yate chileno "Desafío Cabo de Hornos" se adjudicó la tercera etapa de la Portimao Global Ocean Race, gracias a un gran repunte en las millas finales antes de llegar al puerto brasileño de Ilhabela.

Restando 300 millas para arribar a Brasil, era el yate alemán Beluga el que tenía la ventaja por casi 87 millas, pero un viento sur permitió que la embarcación nacional arremetiera al final y se adjudicara la tercera pierna de esta regata que da la vuelta al mundo tras 40 días, 11 horas, 47 minutos y 54 segundos.

El pasado 19 de marzo el barco nacional capitaneado por Felipe Cubillos y José Muñoz, había logrado cruzar el Cabo de Hornos en primer lugar pero, tras cruzar las Islas Malvinas por el oeste, el viento y una tormenta los había alejado de la costa sudamericana, haciéndolos perder la diferencia que había logrado con los germanos.

"Con el 'Negro' (Muñoz) nunca nos entregamos, luchamos cada momento: antenoche cuando descontamos a la mitad la diferencia con los alemanes viramos mas de 20 veces buscando cada pagada y cada negada y buscamos cada brisa de viento que nos pudiera ayudar", relató Cubillos tras adjudicarse la etapa.

Así, los chilenos logran acercase al Beluga en la clasificación general, puesto que los alemanes se habían adjudicado las dos etapas anteriores (Portimao-Cape Town y Cape Town-Wellington), quedando en un muy buen pie para afrontar las siguientes piernas de esta regata, que irán desde Ilhabela hasta Charleston, y de a la meta hasta Portimao.

Por ahora, Cubillos y Muñoz viajarán a Chile mañana viernes, donde podrán compartir con sus familias y amigos unos días antes de retomar con esta exigente competencia.