El desafío de las empresas en la era postpandemia



Por Miguel Ángel Díaz Académico de la Universidad de Chile Socio de BRAC Group

Un interesante artículo publicado recientemente por Pulso, recogido a su vez del The Wall Street Journal, da cuenta de cómo la empresa automotriz Volkswagen se prepara para un mundo desglobalizado.

La nota aborda cómo la compañía alemana está cambiando sus enfoques de producción debido al retroceso que ha tenido la globalización como efecto de la pandemia, las disputas comerciales y ahora la guerra en el este de Europa.

Parto por señalar que las empresas globales, de mayor tamaño, tienen desafíos importantes en la era post pandemia, considerando la estela de consecuencias que ha dejado el coronavirus en todo el planeta, con efectos económicos que se arrastrarán por un buen tiempo.

Efectos que me parece no provocarán un proceso de desglobalización como se plantea en el texto del mencionado artículo, porque si bien la pandemia ha provocado importantes desajustes, no es que vaya a ocurrir un desescalamiento del mundo globalizado. Al contrario, las empresas han debido buscar nuevas fórmulas para adaptarse al escenario pandémico, y deberán volver a hacerlo para mantenerse competitivos en la era post pandemia.

Uno de los principales desafíos que tienen hoy las compañías de mayor tamaño se refiere a las dificultades logísticas y de conectividad que están afectando los procesos productivos a nivel mundial, y que se puede observar en distintos tipos de industrias, por ejemplo, para disponer a tiempo de los insumos importados que requieren para la producción de bienes y servicios.

Un ejemplo local de esta realidad es lo que está ocurriendo con compañías agroalimentarias, que no están pudiendo embarcar a tiempo sus productos hacia los mercados internacionales por la falta de barcos para trasladarlos, lo cual supone una amenaza importante porque se trata de un sector donde los tiempos de entrega son fundamentales.

En este contexto, adquieren particular importancia para las compañías conocer cuales son los recursos y servicios críticos que requieren para mantener la continuidad de su negocio, reduciendo el efecto adverso de condiciones del entorno. Muchas veces esto requiere sacrificar eficiencia para establecer redundancias donde sea requerido, o planes alternativos para mantener un nivel mínimo de operación.

Se vuelve cada vez más necesaria una adecuada gestión de los riesgos empresariales, donde un análisis profesional y apoyado por la alta dirección de las compañías, permita establecer los costos y beneficios de contar con planes de continuidad operacional, considerando todas las variables posibles de la condición actual de la organización y la mejor estimación posible de los eventos futuros.

Si bien la globalización incrementa las variables que deben enfrentar las compañías, esto no significa que los países vayan a desechar la globalización o que vayamos a retroceder a la época de la industrialización por sustitución de importaciones. Muy por el contrario, la finalidad es aprovechar las oportunidades que se presentan y aplicar transformaciones organizacionales que hagan más eficiente sus procesos productivos y el manejo de los riesgos estratégicos y operacionales en las empresas, donde un aliado central son la innovación y las nuevas tecnologías.

Por Miguel Ángel Díaz Académico de la Universidad de Chile Socio de BRAC Group

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