MacBook Air M2 (2022): más delgado, liviano y poderoso que nunca

⭐⭐⭐⭐⭐

Foto: Apple Insider.

Apple hace pocos meses lanzó su nueva línea de computadores personales, esta vez con el M2, su flamante procesador propio. Con novedades en el diseño y las prestaciones, estamos ante una excelente máquina —aunque muy costosa— que reduce las diferencias entre Air y Pro.




Desde que Apple introdujera el 2008 su línea de computadores light, los MacBook Air —cuando Steve Jobs sacara el primero de todos desde un sobre amarillo—, siempre hubo una definición bastante clara respecto a qué público estaban dirigidos. El Air, por definición, ha apuntado a un público más casual, que no necesitara tanto poder de procesamiento y que a la larga prefiere la liviandad, portabilidad y elegancia del aparato más que sus caballos de fuerza.

Por otro lado, el MacBook Pro ha apuntado a power users, es decir un público que demanda lo mejor de lo mejor en cuanto a rendimiento, gráficos, memoria y performance. Una diferencia que también se refleja en el precio: los Air pueden llegar a ser considerablemente más baratos que sus hermanos mayores Pro.

Pero todo cambió a fines del 2020 con la introducción del chip propietario de Apple, el M1. El rendimiento de este procesador —que se usó en sus recientes laptops pero también en los últimos modelos de iMac, Mac Mini y iPad— dejó boquiabierta a la industria en términos de eficiencia y poder.

Para más remate, en junio de este año debutó la segunda generación del chip, el M2, por supuesto aún más poderoso que su predecesor. Es justamente ese el motor que potencia la cuarta generación de la MacBook Air, más delgados, livianos y brillantes que la versión anterior.  Pero eso no es todo. Vamos a revisarlo con más atención.

Especificaciones

  • Tamaño: 1.13 x 30.4 x 21.5 cms.
  • Peso: 1.24 kg
  • Pantalla: LED IPS Retina Display de 13.6″ (2560 x 1664) 500 nits True Tone
  • Batería: 52,6 vatios hora (hasta 18 horas de reproducción de video según el fabricante)
  • Procesador: Apple M2 con 8 núcleos de CPU (4 de alto rendimiento y 4 de alta eficiencia)
  • Memoria: 8 GB (configurable hasta 24 GB)
  • Almacenamiento: 512 GB SSD (configurable hasta 2 TB)
  • Conectividad: Wi-Fi 6 / Bluetooth 5.0
  • Sonido: cuatro parlantes, Dolby Atmos y tres micrófonos direccionales
  • Cámara: FaceTime HD 1080p
  • Puertos: 1 MagSafe 3 / 2 USB-C/ Thunderbolt / 1 jack de 3,5 mm
  • Sistema operativo: macOS Monterey

Más liviano y delgado que nunca

Como siempre, por el dedicado empeño que le imprimen a su embalaje, sumado a la impresión de encontrarse con el producto por primera vez, sacar un producto Apple de su caja es un placer en sí mismo. Dentro del empaque blanco nos encontramos con el aparato —muy liviano, sólo 1,24 kg de peso—, que de inmediato llama la atención por los grandes cambios que presenta su nuevo diseño.

Dentro de la caja también viene un nuevo cable reforzado (al fin), con el regreso del tradicional enchufe de carga Magsafe 3 —que de inmediato libera un siempre útil puerto USB-C/Thunderbolt— y un cargador USB-C de 30 watts.

Arriba el MacBook Air M1 (2020) y abajo el M2. Su clásica silueta de púa cambia a una recta y lisa. Foto: XDA Developers.

El chasis sigue siendo de aluminio resistente reciclado y el color del laptop que nos tocó revisar fue el modelo plata, aunque también viene en otros tonos como negro medianoche (mi favorito), blanco estelar y gris espacial. El color del cable reforzado para la corriente hace juego con el del computador. Bonito detalle.

Al abrir la pantalla (algo que se puede hacer con sólo un dedo) nos encontramos con el renovado diseño interior del MacBook Air. Lo más llamativo es que el declive tradicional de su diseño (el famoso wedge, con forma de púa) ya no existe. Ahora tenemos un look mucho más plano y uniforme, muy similar al modelo Pro 2021 de 14″ —de hecho, uno al lado del otro son fácilmente confundibles— pero con una delgadez (apenas 11,3 mm de grosor) aún más fina que la generación anterior y un peso pluma que claramente lo hacen un aparato ultra portátil. Con ello también ganan una pantalla algo más grande (13,6 pulgadas).

Los nuevos detalles que presenta el MacBook Air M2 son muchos: partiendo por el lector biométrico en el costado superior izquierdo —que también es el botón de encendido—, bastante más amplio y cómodo de operar que antes. Da la sensación, además, de que el tiempo de respuesta que tiene es también más veloz: a veces parece que no hace falta ni posar el dedo en la tecla para que la pantalla ya esté encendida. El lector sirve igualmente para realizar compras instantáneas, abrir documentos protegidos, acceder a sitios web o validar descargas, entre otros usos. Muy útil.

El teclado —o Magic Keyboard, como les gusta llamarlo— es muy cómodo, silencioso y práctico de usar. Ya no está presente, para bien o para mal, el famoso touchbar sobre el teclado. Personalmente, me alegra. Del trackpad nada que decir: tamaño y sensibilidad impecables.

La bisagra es muy precisa, aunque presenta una leve vibración en la pantalla al momento de dejarla en el lugar que deseamos y comenzar a teclear. En ella, tras unas rejillas, también se encuentran escondidos algunos de sus cuatro parlantes, los que hacen rebotar el sonido en la pantalla para que llegue al usuario.

Quizás el único detalle visual que hace ruido es el largo notch en la parte superior de la pantalla, donde se aloja la cámara frontal. Da la impresión de que pudo haber entrado perfectamente en su reducido marco, aunque tampoco interfiere demasiado en la experiencia. La webcam —al fin— es de 1080p, full alta definición, aunque en reuniones vía Zoom o similares no noté un aumento significativo en la resolución. Espero que los demás sí hayan visto la diferencia.

El famoso notch de la webcam. Un lunar que llama la atención aunque luego se olvida. Foto: James Yerema.

En el lateral derecho, hacia la esquina, tenemos una solitaria pero siempre útil entrada jack 3.5″ para audífonos. En el izquierdo está el puerto de energía con imanes MagSafe (acaso el mejor conector de la historia, que se acopla como si tuviera vida propia) y dos entradas USB-C/Thunderbolt —quizá muy pocas— que además de conectar otros dispositivos permiten carga de energía o usar un monitor de hasta 6K.

Pantalla vívida y sonido prístino

La pantalla es una Liquid Retina, por supuesto, con tecnología True Tone y levemente más grande que la de generaciones anteriores. Hay más espacio y eso se agradece. Eso sí, no hay ProMotion (modo que permitía el ajuste automático de la tasa de refresco de la pantalla), pero los 120 Hz están asegurados, por lo que siempre se puede contar con una experiencia fluida de animación y transiciones visuales.

Además, Apple aumentó el brillo de su display a 500 nits, por lo que la visualización general —independiente de la luz ambiental— es sumamente rica y con colores muy vívidos. La visual es de 13.6 pulgadas, lo que quizás no se note tanto respecto al MacBook Air M1 —son 0,3 pulgadas más— pero sin duda es una ganancia en espacio. Considerando que las dimensiones totales de este modelo son menores, el hecho de que hayan podido incluir una pantalla más grande es un tremendo logro.

El sonido también es muy bueno. Es un sistema de cuatro altavoces que permiten tecnologías como Spatial Audio y Dolby Atmos. Comparándolo con otros dos laptops de la competencia, el que demostró la mejor calidad aural fue el MacBook Air, con un sonido más prístino y potente que sus competidores.

Además de que todo funciona, los detalles que ofrece el entorno macOS son muy agradables, desde la posibilidad de desbloquear el aparato desde el reloj, contestar llamadas del iPhone desde el computador hasta utilizar un iPad como segunda pantalla. La integración, como nos tiene acostumbrados Apple, es muy buena.

Batería muy duradera y carga rápida

Apple asegura que la batería del Air M2 puede llegar a durar hasta 18 horas de uso con carga completa. En nuestras primeras impresiones el rendimiento ha sido notable, con apenas un 10% de reducción de energía tras un par de horas de trabajo intenso, con varias aplicaciones abiertas como Spotify, WhatsApp, navegador, apps de redes sociales, videos y documentos de texto.

La carga completa del aparato, de 0 a 100%, toma unos 150 minutos (2 horas y media) si se ocupa el adaptador de 30W. Apple vende por separado un cargador de 67W que, al tener más del doble de potencia, reduce los tiempos en más de la mitad.

En lo que se refiere a almacenamiento, el modelo que usamos de prueba cuenta con 512 GB de memoria en estado sólido (SSD), lo que para la mayoría de los usuarios debería ser más o menos suficiente. De todos modos, hay modelos que llegan hasta los 2 TB (y uno más económico de 256GB, que ha levantado algunas polémicas por su rendimiento).

Un procesador muy contundente

La estrella, por supuesto, es el procesador de la máquina. El chip de ocho núcleos propietario de Apple, el M2, no cambia las reglas del juego como lo hizo su antecesor (que puso en aprietos a toda la competencia), pero sí es 1,4 veces más veloz, una considerable mejora que aumenta aún más los caballos de fuerza de la experiencia.

En ese sentido, los 8 GB de memoria RAM se hacen más que suficientes. Similar a como pasó en el también comentado iPad Air. Aunque también está la opción de contar con modelos con más memoria, hasta 24 GB, pero eso puede ser un poquitito… mucho.

Y es ahí donde está la clave de la experiencia que hace que el MacBook Air sea una delicia: su uso, desde el momento en que se enciende hasta que se cierra la tapa, es perfecto. Tras algunas semanas de exploración nunca hubo un atisbo de recalentamiento o de demora, y eso que el aparato no incluye ventilador sino que un sistema de refrigeración pasiva.

Considerando que soy un usuario habitual de MacBook Pro, personalmente creo que este MacBook Air M2 es un bienvenido refresco que consigue replantear mis necesidades ante un computador portátil. Es decir, salvo excepciones —como trabajos gráficos realmente exigentes y constantes—, ¿realmente es necesario contar con un MacBook Pro? ¿O la versión Air es todo lo que de verdad necesitamos? Por mi parte, ya crucé el puente.

Veredicto Práctico

Con su línea M2, Apple desdibujó la frontera entre el MacBook Pro y el Air. Para la gran mayoría de los usuarios, lo que trae esta nueva versión del Air será más que suficiente para contar con una potente, óptima y duradera sesión de uso, útil tanto para trabajar, divertirse o comunicarse, en un aparato que además es muy liviano y agradable de usar.

La empresa californiana acaba de establecer un nuevo estándar para laptops. Al poderoso chip M2 le agrega este nuevo, delgado y liviano diseño, dejando la vara muy alta para el resto de la industria de computadores portátiles. ¿Una debilidad? Su muy alto precio.

Nota: ⭐⭐⭐⭐⭐ (5/5)


*Los precios de los productos en este artículo están actualizados al 17 de agosto de 2022. Los valores y su disponibilidad pueden cambiar.

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