El Corte Inglés celebra 75 años con el reto de volver a crecer ante la fuerte competencia

El Corte Inglés nació en 1890 como una sastrería en España, que luego fue comprada por la familia Areces, controladora de la firma que luego se formó como sociedad en 1940. Hoy, el gigante del retail hispano que se ha transformado en una marca icónica, y que también está presente en Chile y enfrenta el desafío de reinventarse para competir con multinacionales de rápido crecimiento, como Inditex o IKEA.
“La historia de El Corte Inglés es parte de nuestra historia y está ligada a todos nosotros”, dijo a PULSO desde España el analista del banco Mirabaud, Gonzalo Sanz, explicando que la firma, que tiene desde agencias de viaje, a ópticas y servicios financieros, atraviesa un período de transformación.
“El Corte Inglés se está rearmando y rehaciendo completamente frente a unos años complicados, ya que en la última década le ha ido apareciendo una competencia enorme en diferentes segmentos. No hay un El Corte Inglés 2, no hay una empresa similar, sino que hay grandes cadenas que compiten en diferentes segmentos”, señaló.
Sanz ejemplificó que en alimentación está compitiendo con Mercadona; en moda enfrenta a Inditex; en deporte está la francesa Decathlon; en muebles la sueca IKEA y también está Media Markt en electrodomésticos. “Diferentes cadenas apretaron a El Corte Inglés y ahora se tiene que reinventar para competir con estos grandes”, aseguró.
Una forma de mantenerse competitivo ha sido ser pionero en el comercio electrónico, garantizando entregas en un plazo máximo de dos horas en algunas ciudades, además de ofrecer descuentos exclusivos en su portal de Internet.
¿Posible IPO?
El Corte Inglés es una empresa familiar típica, como muchas otras en España, dijo el analista de Banco de Investimento Global, Steven Santos, agregando que la empresa está intentando capitalizar tanto la recuperación reciente de la economía española como la apreciación del mercado inmobiliario.
Al mismo tiempo, dijo, al ser una empresa altamente endeudada (los pasivos llegan a cerca de 3.000 millones de euros), se está embarcando en la venta de unos 200 edificios no estratégicos. “Las ventas estarán enfocadas en oficinas y centros logísticos, por lo tanto, no van a afectar a sus activos comerciales primordiales”, explicó.
Esto se suma a la colocación de bonos por hasta 150 millones de euros este año, práctica que lleva a cabo desde 2013.
En paralelo, en términos de la propiedad, El Corte Inglés ha sabido abrirse, con la entrada del fondo de riqueza soberano de Qatar a la estructura accionaria el año pasado, después de la muerte de su histórico presidente Isidoro Álvarez, sobrino del fundador original, Ramón Areces. Según Santos, esta inversión financiera podría preparar a la empresa para una futura oferta pública inicial, que podría beneficiar a El Corte Inglés haciendo que mejore su transparencia, su contabilidad y su eficiencia. Y es que al ser una empresa familiar y no abierta a bolsa, se conoce muy poco de la empresa, aunque sí se sabe que la mayoría de las acciones están en manos de parientes de Areces, con el mayor paquete accionario en manos de la Fundación Ramón Areces.
COMENTARIOS
Para comentar este artículo debes ser suscriptor.
Lo Último
Lo más leído
1.
2.
3.
4.
¿Vas a seguir leyendo a medias?
NUEVO PLAN DIGITAL $1.990/mesTodo el contenido, sin restricciones SUSCRÍBETE