Chile es el segundo mercado más relevante para Telepizza tras España. En 2013, la filial local registró ventas por US$73 millones, lo que significó un aporte para el grupo a nivel mundial cercano al 10%, considerando que este tiene una facturación total de US$800 millones.

Pablo Juantegui, CEO de Telepizza global, viene al menos dos veces al año a Chile para revisar la operación local. En esta última visita, el directivo se informó in situ del proyecto de reforma tributaria. Y ante un escenario de cambios, afirma que el compromiso de la compañía con Chile es a largo plazo y que no depende de una política fiscal. “Es uno de los negocios más importantes que tenemos en el grupo. Me gusta ver el negocio en la calle, lo que está pasando día a día”, confiesa.

¿Qué cambios ha visto en el mercado y en el negocio de Telepizza en esta nueva visita a Chile?
Se están haciendo muchísimas cosas, hay un equipo muy potente que está adaptando la compañía a las necesidades de un consumidor que cada día es más sofisticado y que demanda mucho más. Ese escenario requiere que nosotros estemos constantemente ajustando nuestra oferta.

¿Cómo se manifiesta este consumidor más exigente?
Los consumidores están demandando constantemente que innoves, que les enseñes cosas nuevas; piden sabores, ingredientes y masas diferentes. Es algo evolutivo y pasa en todo el mundo, por eso estamos intentando proporcionar nuevas experiencias de consumo. Por ejemplo, la interacción que tenemos con nuestros consumidores es mucho más online que analógica, por eso durante mayo lanzaremos aplicaciones para que puedan hacer un pedido en tres click. Estas innovaciones permiten al consumidor adaptarse mejor, y las compañías de consumo tenemos que estar siempre a la vanguardia y cerca de los cambios.

¿Qué proyecciones tiene respecto al lanzamientos de estos nuevos servicios?
Estimo que dentro de dos ó tres años, probablemente, el 60% de los pedidos que tenga Telepizza Chile serán digitales y quizás de ese 60% más de la mitad sea a través de aparatos móviles.

¿Hoy cuánto representa la venta online?
Estamos en un 15%, pero el crecimiento que experimenta es muy fuerte. En marzo se han duplicado los pedidos a través de la página web, por lo que hay una evolución exponencial. La experiencia que tiene el consumidor con la compra digital es mucho mejor.

En 2013 la facturación de Telepizza Chile fue de US$73 millones. ¿Cuánto estima que será el crecimiento este año?
Estamos hablando de un crecimiento entre el 7% y el 10%. Eso es un combinado de crecimiento en las tiendas y un plan de aperturas que tenemos durante el año. Terminaremos con 142 tiendas al final de 2013. Serán cinco tiendas más en saldo neto: abriremos dos en el norte, una en la zona sur y dos en la Región Metropolitana, más otra en el aeropuerto de Santiago.

¿Para este plan de crecimiento, cuál es la inversión estimada?
Como grupo, todos los años invertimos aproximadamente US$28 millones, los cuales repartimos en los países en función del desarrollo y capacidad de crecimiento. En Chile, este año hay un plan muy importante de inversión, la que no será inferior a los US$4 millones y que contempla tres capítulos: primero en la plata de producción, luego en  la expansión horizontal y finalmente en el cambio de imagen.

¿Este plan se podría ver modificado o está siendo reevaluado con el proyecto de reforma tributaria?
Tenemos un conocimiento limitado de esto porque es algo que está bajo discusión. Es un proyecto de ley que hasta que se convierta en ley es difícil opinar sobre él. Lo único que puedo decir es que nosotros como compañía seria, que está en muchos países y mercados, somos absolutamente respetuosos con la política fiscal de cada uno de los países y cumplimos a raja tabla la normativa legal y fiscal, y en este caso haremos exactamente lo mismo.

Al ser una empresa extranjera, ¿cómo les afecta la eliminación del DL 600?
No somos una empresa extranjera, somos una compañía local. Si nos preguntan si esta reforma tributaria va a afectar los planes de inversión que tenemos previsto para el país, la respuesta es no. No vamos a reevaluar nuestras inversiones por esta reforma tributaria. Llevamos 21 años en Chile, somos una compañía local chilena. En 21 años hemos tenido varias reformas y sistemas fiscales distintos, y nuestro compromiso con Chile no depende de una fiscalidad determinada en un momento dado. Es una visión más a largo plazo.

No somos una importadora. Fabricamos y vendemos en Chile. Invertimos en Chile los propios fondos. Los US$4 millones de inversión son fondos generados por la operación en el país.

Entonces, ¿no coincide  en que esta reforma podría reducir las inversiones extranjeras?
Es evidente que todos los cambios legislativos tienen efectos. Con independencia de cuál sea el impacto, nuestra apuesta por Chile es a largo plazo, no somos unos oportunistas que estamos aquí dos años y que si la cosa viene mal nos vamos. Ya tenemos demostrado que nuestro compromiso con Chile va mas allá de un cambio legislativo.

¿Telepizza enfrenta estos cambios en buen pie?
La salud de la compañía es muy buena, llevamos muchos años trabajando con constancia. Parece ser que Telepizza ha sido capaz de conectarse con el consumidor chileno.

En esta línea, ¿cuáles son los desafíos que tiene la compañía para este año?
Mantener al consumidor chileno al lado de Telepizza y atraer a un mayor número de clientes. Hay mucha competencia; el consumidor tiene muchas alternativas.

En Chile somos líderes; tenemos un 60% de cuota de mercado y lo que pretendemos es que ese 60% no nos nuble, la idea es modernizar la marca y llegar al nuevo consumidor. Este mercado es tremendamente dinámico y tiene muchísima entrada y salida de operadores. El tener éxito y mantenerse tantos años no es fácil. No puedes ser oportunista, tienes que tener una visión a largo plazo.

Dado este contexto y la enorme proliferación de actores en este mercado, ¿existe espacio para crecer?
Creemos que sí. Somos la marca más capilar que hay en Chile y eso nos permite una especie de círculo virtuoso. Vemos un escenario en el cual podríamos llegar a las 200 tiendas en el país en los próximos dos años .

¿Cuáles son los riesgos?
Es evidente que nuestro mercado está muy ligado al consumo y éste depende de cuál sea la situación económica del país. Hoy Chile vive una situación absolutamente envidiable, con pleno empleo y una situación económica muy pujante y fuerte. Si llegáramos a una situación de contracción o aumento del desempleo, esas cosas afectan al consumo.