“La mejor semana de su corta vida”: los días que pasó Sinead O’Connor con una fan con cáncer

"La mejor semana de su corta vida": los días que pasó Sinead O’Connor con una fan con cáncer.

El padre de una joven con cáncer terminal y que era fan de Sinead recordó el momento en que la artista la llamó a la casa familiar: quería conocerla y que se quedara con ella en Londres. Ambas mantuvieron una estrecha relación que se prolongó por varios meses.


La muerte de Sinead O’Connor ha generado un gran pesar entre sus fanáticos y toda la industria musical. Fue el 26 de julio que se dio a conocer que la aclamada artista irlandesa había fallecido a sus 56 años de edad, en su casa ubicada en Londres. Hasta ahora, no han trascendido mayores detalles sobre la causa de muerte.

La intérprete mundialmente conocida por singles como Nothing Compares 2 U y Drink Before The War dejó detrás un exitoso paso por la música que duró tres décadas, pero también varios episodios dolorosos que con los que tuvo que lidiar en sus últimos años de vida, entre ellos, la muerte de su hijo de 17 años en 2022.

Su partida ha generado que se hayan estado realizando múltiples homenajes en su honor en todo el mundo. Al mismo tiempo, también han vuelto a aparecer las historias más icónicas sobre O’Connor, algunas más conocidas y otras no tanto.

Una de ellas vincula a la compositora con Louise Woolcock, una joven del Reino Unido que era amante de la música de Sinead y que estaba sufriendo cáncer terminal.

A través de una carta publicada en el diario británico The Telegraph, el padre de Louise contó el inolvidable gesto que hizo O’Connor con su hija en la década de 1990, para cumplir el que quizás era uno de sus últimos deseos: la contactó no solo para que se conocieran, sino que también para que se quedaran juntas en Londres.

Sinead O'Connor falleció el pasado 26 de julio. Foto: Reuters/Mario Anzuoni.

Los días de Sinead O’Connor junto a una fan con cáncer

Philip Woolcock lo recuerda como si fuera ayer. Era el año 1991 y su hija Louise, quien estaba afrontando un cáncer terminal, recibió una llamada telefónica “de la nada”. Al otro lado de la línea se escuchaba la voz de Sinead O’Connor, quien estaba en uno de sus mejores momentos de su carrera. Para ese momento Louise tenía 20, y Sinead, 24.

“Sinead se había enterado de la enfermedad de Louise por alguna fuente, probablemente la prensa, cuando estábamos recaudando fondos para nuestro hospicio local. Mi hija era una gran admiradora de ella y amaba su música”, escribió Philip, quien hoy es profesor jubilado.

Durante la llamada, la cantante invitó a la joven para que se conocieran en persona y se quedara en su piso en Londres. “No hace falta decir que Louise estaba encantada”, recuerda su padre.

Después de esa comunicación, Louise empacó sus cosas y viajó en tren hasta la estación de Euston. Fue allí donde vio por primera vez a Sinead. El encuentro se puede resumir, en palabras de Philip, en que Louise pudo tener “la mejor semana de su corta vida”.

“Cenaron, bebieron, bailaron, pero sobre todo se rieron irreverentemente. Sinead estaba en el apogeo de su fama en ese momento y le resultó muy divertido que, cuando estaban fuera, la gente pidiera el autógrafo de Louise”, dice el británico.

En entrevista con The Sun, Philip añadió que incluso las jóvenes se encontraron con Peter Gabriel en una de las salidas. “Fue una noche salvaje y no creo que durmieran nada. Terminaron en Pizza Express, donde Sinead y Louise cantaron Love Shack a todo pulmón”, dijo.

Para ese momento Louise estaba con su quimioterapia, por lo que se le había caído parte de su cabello y en algunas zonas estaba volviendo a crecer. Sinead, en tanto, llevaba su tradicional rapado. En uno de los días que pasaron juntas, la irlandesa le afeitó la cabeza a su seguidora y ambas quedaron con un look idéntico.

Al regresar a su hogar, la joven llegó muy cansada, pero mucho más contenta desde que había recibido su diagnóstico de cáncer e iniciado su tratamiento.

Sinead O'Connor y Louise Woolclock en 1991.

El vínculo no se quedó solo en el encuentro en Londres, sino que fue mucho más allá. “Esta mujer encantadora y compasiva siempre se mantuvo en contacto. Envió vino, flores y cartas a Louise hasta su muerte en 1992″, escribió Philip en su carta.

El británico destacó que la compositora fue una “amiga maravillosa” y un “faro de luz” que pudo iluminar los complejos días que atravesaba Louise, debido a la enfermedad que tenía.

“Sinead confiaba en Louise como una hermana. A menudo hablaba de que había salido de la nada y de que no estaba segura de quién era genuino en su vida. No era una celebridad para nosotros, solo era Sinead, una amiga maravillosa para nuestra hija moribunda”, dijo al medio.

La última ocasión que Louise pudo visitar Londres, la estrella irlandesa le entregó un importante regalo: el disco platino que había recibido por Nothing Compares 2 U. También le dedicó la canción de Navidad Silent Night.

Ese mismo año, después de haberse reunido con la cantante, la joven recibió una llamada del representante del monarca para relatarle que la Princesa Diana quería conocerla. Se pudieron reunir en julio de ese año. “Al igual que Sinead, Diana era cálida, acogedora y vibrante”, recordó Philip.

En 1992, el estado de salud de Louise empeoró y tuvo que ser trasladada hasta un hospital para pasar sus últimos momentos de vida. Inmediatamente Sinead llamó a la familia para saber más de su amiga. Según el padre de Louise, estaba “desconsolada por no poder visitarla”.

“Durante todo este tiempo, Sinead nunca buscó publicidad alguna para estos actos de amor y compasión. Hoy mis pensamientos están con dos mujeres notables que, sin duda, estarán en algún lugar todavía riendo, bailando y cantando”, concluyó Philip.

Comenta

Por favor, inicia sesión en La Tercera para acceder a los comentarios.