MasDeco

Límite remoto

Estaban las maravillas naturales y la historia. Ahora, con el desarrollo del diseño, con hoteles como el Rooms Hotel Kazbegi, Georgia está preparada para convertirse en un retiro de nivel internacional.

035dsroomskatzbegi_kopie_0.JPG

De reino pasó a ser república democrática, luego fue absorbida por la Unión Soviética, sufrió una guerra civil y hoy es nuevamente una democracia. Georgia es joven como nación pero desciende de una cultura antigua, profundamente determinada por una condición geográfica: estar en el límite europeo con Asia. La economía georgiana ha dependido tradicionalmente del cultivo de cítricos, té y uvas, de una pequeña minería del cobre, pero sobre todo del turismo en torno al mar Negro. Sin embargo, aunque era su principal fuente de ingresos, la sofisticación de la industria hotelera es reciente ahí. Por supuesto el diseño tiene un rol fundamental en esa operación.

Rooms es un estudio fundado por dos jóvenes nacidas en Tiflis, la capital. Nata Janberidze y Keti Toloraia, amigas desde la infancia, se enorgullecen de decir que la suya es la primera firma georgiana de diseño de productos, que los han presentado con éxito en encuentros internacionales y que su agenda hoy está copada con numerosos proyectos de interiores a nivel local, como hoteles, restaurantes, tiendas y casas particulares.

En el remoto extremo norte de Georgia, al centro del cordón montañoso del Cáucaso, a mitad de camino entre el mar Negro y el Caspio, se encuentra el pequeño pueblo de Stepantsminda, y ahí está la obra más celebrada hasta ahora de la dupla Janberidze-Toloraia. Rooms Hotel Kazbegi, miembro de la cadena Design Hotels TM, lleva el nombre que se usaba antiguamente para designar esta región, el del poeta que dedicó su obra a las rimas épicas sobre su paisaje.

Este hotel de 156 habitaciones, inaugurado en julio de 2012, único en su tipo en Georgia, fue diseñado con pulcritud para mezclarse discretamente con el entorno y el fondo dramático y formidable que entregan las montañas, cuyas cumbres más altas alcanzan los 5 mil metros. Esa intención de mimetizarse se expresa tanto en los materiales -acero, vidrio y mucha madera- como en sus formas  -simples y geométricas-. Las diseñadoras entendían que el paisaje es el principal atractivo de Stepantsminda, y que así como era necesario evitar alterarlo drásticamente, debían ofrecer múltiples instancias para disfrutarlo, como una extensa terraza de madera, vidrios de suelo a techo en los lounges y balcones en las habitaciones.

En los interiores trataron de reflejar la herencia europea y asiática que caracteriza al país de una manera minimalista. Pisos de madera en bruto, adornados con alfombras indígenas; muebles de la marca belga Flamant y de la marca estadounidense Restoration Hardware dan un toque rústico y al mismo tiempo chic al lobby lounge, el que ofrece diversos espacios más íntimos, separados inteligentemente por bibliotecas. En las paredes, afiches vintage originales de publicidad y cine de la época soviética hablan a los huéspedes sobre la historia de Georgia. Alrededor de acogedoras chimeneas, ellos pueden acomodarse en cómodos sillones. A la hora del descanso se retiran a habitaciones decoradas con una paleta que se mueve entre grises y cafés, con toques ocasionales de colores más vivos. En todo momento, en cualquier espacio, de una u otra forma, la montaña está siempre presente.

035dsroomskatzbegi_kopie_0.JPG

COMENTARIOS

Para comentar este artículo debes ser suscriptor.

¿Vas a seguir leyendo a medias?

NUEVO PLAN DIGITAL $1.990/mesTodo el contenido, sin restricciones SUSCRÍBETE