“Diseñar para niños conlleva un acercamiento cuidadoso y delicado, no solamente en términos de seguridad, sino también en la búsqueda de resolver circunstancias y momentos existentes en el cotidiano de una familia contemporánea, donde los niños ocupan una posición primordial”. Así lo entiende el diseñador mexicano y así lo proyecta en esta serie de materiales naturales y formas ultraorgánicas, una colección conformada por un sillón, un banco/cesta y un juguetero. Cada uno de estos muebles responde de manera semejante a lineamientos definidos por diversos factores, como la elaboración, la elección de los materiales y su capacidad de adaptación a cualquier entorno. La línea fue recientemente presentada en la feria Maison&Objet en París.

Un aspecto fundamental para el desarrollo de Traven fue el uso de materiales y procesos de transformación responsables con sus contextos, tanto sociales como ambientales. La aplicación de mimbre, madera certificada, lana artesanal y acabados naturales así lo avalan, garantizando un producto consciente de la realidad que habita y responsable en cada momento de su existencia.

“La familia Traven se distingue por reconocer la importancia del juego al momento de usar un mueble; sus volúmenes y formas sencillas fomentan un escenario donde los niños pueden vivir una experiencia distinta con cada uno de los objetos concebidos”.