Gobierno argentino prepara envío de al menos 4.500 efectivos al Gran Buenos Aires por inseguridad y narcotráfico

Frente al temor a que en un año electoral el Gran Buenos Aires (GBA) se convierta en un nuevo Rosario, en alusión a la violencia narco que afecta a la principal ciudad de la provincia de Santa Fe, el gobierno del Presidente argentino Alberto Fernández ordenó el envío de al menos 4.500 efectivos al Conurbano en el marco de un plan contra la inseguridad y el narcotráfico, informó hoy el diario Clarín.

Según el periódico porteño, la Casa Rosada diagramó un plan para enviar gendarmes a cinco municipios del Gran Buenos Aires “sin avisarle” al gobernador bonaerense Axel Kicillof, quien habría enviado una carta pidiendo aclaraciones y explicaciones por el “ninguneo” al que, según él, lo sometió el ministro de Seguridad Nacional, Aníbal Fernández.

Lo que hasta ahora pudo confirmar Clarín con el Ministerio de Seguridad es que se construirán cinco bases de “respuesta rápida” en Avellaneda, Tigre, La Matanza, Pilar y La Plata. Una alta fuente de las Fuerzas Federales, cuyos jefes están terminando de armar las listas de gendarmes, prefectos y policías federales para mandar al Conurbano, señaló al medio argentino: “Al menos serán unos 4.500 efectivos que se sumarán a los aproximadamente 2.000 gendarmes que hoy ya están en el GBA”.

“En la Casa Rosada temen que en un año electoral el GBA se convierta en un nuevo Rosario. Este nuevo plan de seguridad para el Conurbano sigue la misma línea al que el gobierno anunció para la ciudad santafecina”, detalló el diario argentino.

Al respecto, una encuesta electoral midió en la provincia de Santa Fe y los resultados para el oficialista Frente de Todos fueron malos. El estudio que adelanta Clarín este martes es de CB Consultora Opinión Pública, el cual evaluó tres hipótesis electorales, siempre en el escenario de internas: dos presidenciales (uno con Cristina Kirchner y Mauricio Macri, y otro sin ellos) y uno para gobernador.

En el primero escenario, con Cristina y Macri en la oferta, la suma de precandidatos de la alianza opositora Juntos por el Cambio le saca más de 10 puntos a la del Frente de Todos (35,3% a 24,5%). En el segundo cuadro, sin la vicepresidenta (ni Macri) el panorama se pone “rojo oscuro” para el oficialismo. Con la suma de seis postulantes apenas llega a 19,4 puntos, señala el medio transandino. En tanto, Juntos por el Cambio se empina a 34,9.

En cuanto a la pelea por gobernador, las Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (que en Santa Fe son el 16 de julio, un mes antes que las nacionales) también ubican arriba a la oposición. En la encuesta de CB, Juntos por el Cambio totaliza un 30,2% de intención de voto, frente al 20,5% que logra el Frente de Todos.