“Operación Caserío”: PDI allana 70 domicilios y detiene a 38 personas en el marco de indagatoria a organización criminal de Tarapacá

“Operación Caserío”: PDI allana 70 domicilios y detiene a 38 personas en el marco de indagatoria a organización criminal de Tarapacá

El procedimiento, para el cual se desplegaron 600 detectives provenientes de todo el país, terminó con la incautación de 12 armas, municiones y droga.


Este miércoles, la ministra del Interior, Carolina Tohá, junto al fiscal nacional, Ángel Valencia, y al director general de la Policía de Investigaciones (PDI), Eduardo Cerna, entregaron el balance de la “Operación Caserío”, efectuada durante la mañana en la Región de Tarapacá por parte del equipo de Modelo Territorial Cero de la Brigada de Investigación Criminal Alto Hospicio, en coordinación con la Fiscalía.

El operativo policial se desarrolló en el marco de una investigación por el delito de Infracción a Ley de Drogas, en la que se estableció que una organización delictual chilena operaba en la Región de Tarapacá desde el 2021.

Se desplegaron 600 detectives provenientes de todo el país para apoyar el procedimiento y, en concreto, se allanaron 70 domicilios en las comunas de Pozo Almonte, Alto Hospicio, Iquique y Pica, y en las localidades de Chanavayita, Matilla y Colonia Pintados.

Tras el operativo, se incautaron 12 armas -algunas “de altísimo calibre”-, municiones y drogas. Además, se detuvo a 38 personas, tanto de nacionalidad chilena como extranjera.

“En atención de distintas diligencias de investigación, tales como interceptaciones telefónicas, agentes encubiertos y otras que es mejor no mencionar por ahora, se logró determinar la responsabilidad en el ilícito de tráfico de droga en pequeñas cantidades y determinar además que estamos en presencia de una asociación ilícita para cometer ese delito”, detalló la fiscal regional de Tarapacá, Trinidad Steinert.

La persecutora detalló que dicha asociación “se organizaba a través de una estructura completa, donde está el líder -que está detenido actualmente-, quien, a través de la entrega de vehículos robados en el límite fronterizo, los cambiaba por drogas que después eran acopiadas en los distintos inmuebles”. Luego las sustancias eran distribuidas en toda la región.

“Un caso que tiene un alcance nacional”

El director de la PDI relevó que se trata de “un proceso investigativo exitoso, relacionado con una estructura criminal conformada por chilenos y extranjeros, que de un tiempo a la fecha ha estado operando y generando temor en la ciudadanía”.

“Esta estructura criminal acopiaba armas, drogas, vinculaba a personas extranjeras a través de la trata y generaba un proceso permanente de acopiar riquezas, medios y vehículo”, añadió, además de precisar que “se está investigando” la existencia de trata de personas en el caso.

En tanto, la ministra Tohá sostuvo que “claramente tenemos un caso que tiene un alcance nacional”, debido al “tipo de banda que se está golpeando en esta oportunidad, que actúa en un territorio, pero que genera intimidación más allá del territorio en el que actúa”.

“Tiene ciertamente también una dimensión internacional, no sólo porque los componentes de la banda incluyen a personas extranjeras, sino que también algunos de los delitos que cometían lo hacían haciendo operaciones que incluían territorios de otros países”, agregó.

Por su parte, el fiscal Valencia dijo que “acá hay una banda organizada y esta comunidad no sólo veía como se traficaba droga, sino que además aquí también se cometían otros delitos graves”. Lo peor, aseguró, “es que esto es con control territorial, es decir, impiden que la comunidad ni siquiera los espacios públicos los puedan aprovechar”.

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