Nacional

Desde O’Higgins hasta Magallanes el presidente electo triunfó en todas las comunas: ¿Por qué el sur es de Kast?

Jeannette Jara no logró imponerse en ninguna comuna más al sur de la Región Metropolitana, con 212 territorios dominados por el republicano. Expertos locales explican el resultado por la transferencia de votos de Franco Parisi y por la mayor sintonía del electorado con el discurso de seguridad.

MARIO TELLEZ

Este domingo José Antonio Kast se convirtió en el presidente electo más votado de la historia de Chile, con 7.252.831 de votos, equivalentes al 58,17% de las preferencias. Pero más allá de esas cifras, el resultado dibujó un mapa claro. El exdiputado triunfó en 314 de las comunas de Chile, de un total de 346, y desde la Región de O’Higgins hasta la de Magallanes el republicano venció en todas las 212 comunas que están hacia el sur de la Región Metropolitana.

Un panorama muy distinto a las elecciones de 2021, pues en segunda vuelta y con Gabriel Boric como contendor, si bien Kast había tenido el peso de su fuerza en esos territorios, esa vez ganó en 131 comunas de O’Higgins hacia el sur, mientras que el actual Presidente había vencido en 81. Jara quedó en cero.

Esta no es la primera vez que el desempeño electoral de José Antonio Kast es positivo en el sur. En la elección presidencial de 2021, el entonces candidato republicano se impuso en varias regiones. Por ejemplo, en la del Ñuble venció en todas las comunas (la única con ese factor absoluto esa vez), mientras que en La Araucanía solo perdió en la comuna de Saavedra. El tema es que ahora pasó de resultados positivos a aplastantes.

Según los análisis del Núcleo de Humanidades y Ciencias Sociales de la Universidad del Desarrollo, en la zona centro-sur (Ñuble, Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos) Kast se impuso en las 128 localidades que conforman ese territorio, con un promedio de votación de 68,7% frente a 31,3% de la candidata oficialista Jeannette Jara. Respecto a la primera vuelta, Kast aumentó en promedio 37,6 puntos porcentuales, mientras que Jara creció 11,5 puntos porcentuales.

Emilio Moya, sociólogo e investigador del centro de políticas públicas de la UC de Temuco, señala que “Parisi obtuvo una importante votación en el sur y diría que ese voto se fue mayoritariamente a Kast. De hecho, él cerró acá su segunda vuelta. Existe un clivaje importante de apoyo a los candidatos de la centroderecha y la derecha que ha sido constante en las elecciones. Al Presidente Boric le fue mal y también en sus primeros meses de gestión: recordar cuando viene la exministra de Interior Izkia Siches, que tiene que retirarse de ciertos sectores. En ese contexto, el discurso del presidente electo en términos de crecimiento y de seguridad encajó mucho mejor que el relato de Jeannette Jara”.

Asimismo, los expertos locales afirman que el factor seguridad también fue fundamental. De hecho, Moya agrega que “en La Araucanía particularmente, el tema de seguridad y economía aparecía muy fuerte en ciertas encuestas de opinión que hacíamos como universidad y de alguna manera coinciden con el relato que José Antonio Kast llevó tanto en primera como segunda vuelta, además de años anteriores”. De todas formas, cree que también caló “profundamente en ciertos sectores del sur una candidatura comunista: sigue habiendo un miedo, con o sin fundamentos, pensar que en Chile se iba a instalar un régimen comunista”.

Por eso, advierte, “ojo con pensar que el 58% apoye realmente a Kast, hay que ser mesurados, no vaya a pasar lo que le pasó a Boric, que se pensó que el 56% lo apoyaba. En las segundas vueltas generalmente hay un voto “en contra de”; Kast en la primera vuelta obtuvo 25%”.

En tanto, Pedro Díaz, analista político de la Universidad Austral plantea que “los territorios tienen dinámicas propias. En el centro y en el sur la realidad está marcada por el alto desempleo y por problemas de seguridad, temas que generaron mayor confianza en las propuestas de Kast respecto a las de Jara”.

En el caso de Los Lagos en particular, el académico de la región también añade que el apoyo a Kast en la segunda vuelta se explica principalmente como una manifestación de desaprobación al gobierno de Boric y una desconfianza hacia las medidas que impulsaría Jara. “El desempleo en la región no contó con una política correcta, los discursos asociados a potenciar la descentralización quedaron solo en la retórica, y los proyectos de inversión fueron postergados ante la llamada permisología”, dice.

Esas razones podrían explicar otros datos, como que en el balotaje de 2021 el candidato republicano obtuvo más del 60% de las preferencias en 57 comunas y ahora ese apoyo lo obtuvo en 172 comunas. Incluso, en 72 localidades superó el 70%. Su mejor resultado esta vez lo logró en Pinto (Ñuble), con 79,9% de los votos. Y a Jara donde mejor le fue en esta parte de Chile fue en Valdivia (Los Ríos), con 46,2%.

Francisco Gatica, director del Departamento de Economía y Finanzas de la Facultad Ciencias Empresariales de la U. del Bío-Bío, añade que pueden existir otros factores.

“Independientemente de los liderazgos políticos locales, la victoria del candidato José Antonio Kast es significativa y es consistente con lo observado en las elecciones de diputados, donde en los casos del distrito 20 y 21 tenemos una amplia mayoría de representantes de oposición al actual gobierno. En definitiva, las diferencias territoriales no distan mucho del escenario nacional; por tanto, la victoria de Kast responde a lógicas transversales asociadas a la afinidad con su discurso político”, detalla.

Para Jeanne Simon, académica del Departamento de Administración Pública y Ciencia Política de la Universidad de Concepción, la lectura es que en la primera vuelta Jara fue la única candidata del oficialismo, concentrando la votación de la centroizquierda. Y recuerda que en el Biobío, Kast y Parisi ganaron en casi la totalidad de las comunas, mientras que la militante del PC lo hizo principalmente en la provincia de Concepción y con poco margen en relación al Presidente electo. “Así, Kast gana con algunos de los votantes de Kaiser, Matthei y Parisi”. En Ñuble, ganó Kast en todas las comunas en la primera vuelta, resultado que atribuye “principalmente al trabajo de Martín Arrau, que ha sido constante hace cinco años”.

Mientras, en las 21 comunas que forman las regiones de la zona sur (Aysén y Magallanes) Kast también se impuso en todas, con un promedio de preferencias del 62,2% (su mejor resultado fue en Timaukel, de Magallanes, con 77,1%), frente a 37,8% de Jara. El presidente electo aumentó en promedio 34,6 puntos porcentuales en esta zona, mientras que Jara creció 12,4.

Felipe Lagos, doctor en Sociología y jefe de la Unidad de Estudios Regionales de la Universidad de Magallanes, afirma que esto se produce por varios factores: “En el caso de esta región se combinan algunos factores: primero, un centralismo a toda prueba que se percibe como subordinación, instrumentalización y a ratos directamente abandono del Estado hacia sus regiones y hacia el mundo no urbano, algo que ha sido muy bien capturado por el discurso de la ineficiencia estatal (...) pese a tener índices de confianza interpersonal muchísimo más altos que otras regiones (Barómetro Regional Magallanes 2024) y dinámicas distintas a las del resto del país en materia de seguridad pública, la prensa local ha contribuido en instalar una percepción de desborde que se alinea con el discurso del miedo que ha primado en esta elección”.

Esa aplastante victoria comuna por comuna en el extremo sur, por cierto, también se repitió en las regiones de O’Higgins y el Maule. En esta última región está Empedrado, que fue la de mejor desempeño para Kast de O’Higgins hacia el sur, con 84,71% de las preferencias, superando su 73,62% del balotaje de 2021.

Mario Herrera, académico de la Universidad de Talca, explica que en esta última región las respuestas se pueden encontrar en la ruralidad, los resultados senatoriales y “una transferencia de votantes de Parisi que se va más a Kast que a Jara. Ese resultado, que fue una sorpresa en la primera vuelta -a Parisi le solía ir bien en el norte-, expresó su desafección hacia la opción de Kast en la segunda vuelta”.

Del mismo modo, Sebastián Salazar, docente adjunto de la Universidad de O’Higgins, concluye que “el triunfo de José Antonio Kast en esta región puede explicarse, en términos generales, por los mismos factores que sustentaron su desempeño a nivel nacional: la centralidad de las demandas por orden, seguridad pública, control migratorio y estabilidad económica, en un contexto de alta percepción de incertidumbre y malestar social”.

Factores más -o menos- lo cierto es que Kast logró revertir comunas donde le había ido mal (bajo 40%) en la segunda vuelta en las elecciones anteriores, como Graneros (35,98% en 2021 versus 56,93% ahora), Peumo (34,27% vs 54,79%), Corral (35,16% vs 58,76%), Chonchi (37,57% vs 60,82%), Puqueldón (34,48% vs 63,47%), Quinchao (31,93% vs 59,89%), Aysén (37,97% vs 57,34%), Tortel (35,17% vs 54,57%), Chile Chico (37,10% vs 53,96%), Punta Arenas (38,64% vs 55,28%), Porvenir (34,10% vs 53,86), Primavera (31,75% vs 55,35%) y Natales (36,55% vs 53,05%).

Por el contrario, si Boric en 2021 tuvo 17 comunas con más de 60% de respaldo, ahora a Jara en la que mejor le fue de O’Higgins hacia el sur fue Natales, de Magallanes, con 47% de los votos.

Más sobre:Elecciones PresidencialesJosé Antonio KastZona surEleccionesElecciones 2025BalotajeJeannette Jara

Plan digital + LT Beneficios por 3 meses

Cobertura completa, análisis y beneficios para todo el año 🔍🎁$3.990/mes SUSCRÍBETE